En el viejo mundo por lo menos, el sacramento de la penitencia ha caído en desuso; está a mínimos y no parece fácil recuperarlo. Conozco pueblos en los que hace más de 35 años que no se sienta un sacerdote en el confesonario.
En las ciudades hace varios años que gran parte de las parroquias, jamás se sienta un cura a confesar. Recuerdo una en la que, delante de las sedes del sacramento ha estado apoyada una escalera de mano, por obras en la sacristía, más de nueve meses.
Durante una época se han impartido, de forma ilegítima, absoluciones generales. Ahora, ni eso. Ni individuales, ni generales. Los obispos lo tienen difícil. Pero es necesario recuperar, donde se ha perdido el sacramento del perdón.
Es preciso llegar a un equilibrio: ni la inflación de la penitencia de los años 40 al 60, en que nos mandaban confesarnos cada siete días, ni lo de ahora.
Con paz y sin espíritu talibán, vamos a recuperar el tesoro del sacramento. ¡Cuántos comulgan sin pasar por el confesonario desde hace años y la vez faltan a Misa gran parte de los domingos!
José María Lorenzo Amelibia
Si quieres escribirme hazlo a: jmla@jet.es
Puedes solicitar mi amistad en Facebook pidiendo mi nombre Josemari Lorenzo Amelibia
Ver página web: http://web.jet.es/mistica