1.- Señor, conmovido por nuestra desdicha, dejaste el seno del Padre y viniste al mundo a abrazar la pobreza y la humildad.
2.- A un amante así, ¿quién no le amará? Mi admiración es de mí mismo, que, a pesar de comprenderlo, de creerlo, de aceptarlo, nunca consigo estar a tono de tan gran beneficio.
3.- Ten misericordia y ayúdame a ser un poco mejor cada día.
4.- Viniste, Salvador nuestro, a curarnos de nuestros males y a merecernos tu gracia. Te agradezco tal amor; ven a aplicar a las almas de tus sacerdotes, de tus almas consagradas, de tus cristianos comprometidos, tu abundante gracia, para que seamos testigos de santidad y de amor.
5.- Con tus humillaciones nos diste un remedio para nuestro orgullo; con tu extrema pobreza, nos diste ejemplo para remediar nuestras ansias de poder y de ganar; con tu pasión, trabajo, sufrimientos, nos diste estímulo para vencer el deseo de placer.
6.- Que se grabe en mi alma tu ejemplo, Señor, que nunca más me determine hacia el desarrollo de mis pasiones.
7.- Termina el año; un paso más hacia la eternidad. Te agradezco de corazón cuanto me has concedido este año. Comenzamos el nuevo siglo, y el nuevo milenio. Que siempre estemos junto a Ti, Señor.
Puedes ver página web de espiritualidad http://personales.jet.es/mistica