Bach, motete BWV 229

Seguimos recorriendo los motetes de Bach. Son unas obras que no son tan conocidas como sus cantatas (que tampoco es que todas sean especialmente populares) pero que, si los estás disfrutando como yo, verás que merecen la pena. Así tenemos una visión más rica y completa de la música del maestro. Tiene unas obras maravillosas y muy conocidas pero es bueno avanzar un poco e ir por caminos menos transitados.

Quiero que hoy disfrutes tanto como yo con su motete Komm, Jesu, komm, BWV 229, es decir, "Ven, Jesús, ven". Es una excepción entre las otras de este tipo de Bach ya que su texto está tomado íntegramente de un himno luterano. Ese texto fue escrito para los funerales de una profesor de la Thomasschule de Leipzig y luego se puso en música. Bach debía de sentirse muy satisfecho por la obra que decidió él mismo ponerle música. Parece que fue compuesto para otro funeral, en 1732 (o quizá antes). En la obra, el viejo kantor explota todas las posibilidades que le daba un doble coro, usando una técnica contrastante, tanto en cuanto al ritmo, métrica, afecto y textura. Son sobrecogedoras las primeras notas, sobre el verbo "Komm", en la que se implora a Jesús que venga a nosotros. Esos bloques corales contrastan con una segunda sección en forma de minueto. Una vez más, el maestro sorprendiéndonos.
El texto en español de la obra puedes seguirlo aquí. La partitura puedes descargarla aquí.
La interpretación que te ofrezco es la de La Chapelle Royale y el Collegium Vocale dirigidos por Philippe Herreweghe.