Danzas antiguas revisitadas

¡Feliz lunes! Damos comienzo hoy a la que será la última semana de agosto. Ni que decir tiene que te deseo que vaya bien y, sobre todo, la disfrutes de principio a fin. Te voy a presentar un compositor que, si mis cuentas no falla, nunca ha venido por aquí, La música que te presento es ligera, fresca, llena de encanto y que a mí por lo menos me recuerda a otra de un compositor italiano algo más renombrado. La antigüedad siempre ha ejercido un curioso influjo sobre los compositores nuevos.

No te traigo ninguna canción sino su Suite Capriol, obra compuesta en 1926 y que se basa en composiciones que se incluyen en el tratado de danza de 1589 de Thoinot Arbeau. Esta suite me recuerda mucho a la música que compuso Ottorino Respighi con danzas renacentista. Es su obra más conocida y está dedicada al compositor bretón Paul Ladmirault. El tratamiento de la música original es libre, con lo que la suite resulta bastante original. Está dividida en seis movimientos contrastantes. El primero, «Basse Danse», es una viva danza y da paso a una «Pavane», lenta y reposada. El tercer movimiento es un «Tordion», de nuevo vivo y lleno de optimismo. Viene luego los «Bransles», que se basa en una obra popular de forma que la velocidad cada vez es mayor y el ritmo más intenso. El siguiente «Pieds» es el movimiento más popular y se llama así debido al tipo de danza que tienen que hacer los bailarines, deslizando suavemente los pies sobre el suelo. Es algo tranquilo antes de la explosión final con «Matachins», danza de las espadas en las que cuatro bailarines parecen luchar. Sus intensas disonancias ponen un brillante fin a la composición.
La partitura de la obra puedes descargarla aquí.
La interpretación es de la Orquesta de Cámara de Noruega dirigida por Henning Kraggerud.