Et exspecto resurrectionem mortuorum



Hoy quiero traerte una obra impresionante del siglo XX. Toda la música de este verdadero maestro lo es, y esta en particular. Es una gran meditación o reflexión sobre el misterio de la resurrección de los muertos, y por tanto propia de estos días pascuales. No solo podemos meditar con textos y lecturas sino también con música.

El maestro es Olivier Messiaen (1908-1992), compositor francés nacido en Aviñón. En este caso, la palabra maestro no es gratuita en él ya que lo ha sido de otros compositores que luego se han convertido en grandes maestros, como Stockhausen o Boulez. Era un virtuoso organista, de la Iglesia de la Trinidad de París. Allí muchos acudían a escuchar sus improvisaciones tras terminar los oficios. También fue un gran ornitólogo. Desde siempre se interesó por el canto de los pájaros, que transcribió y usó en sus obras de una forma fidelísima. Además, se confesaba abiertamente católico y eso se nota en sus obras, de gran contenido religioso y trascendente. Escuchar una obra de Messiaen es una experiencia que no deja impasible a nadie.

En 1964 compuso la obra titulada Et exspecto resurrectionem mortuorum, para 18 maderas, 16 metales y tres percusionistas. Messiaen era sinestésico y percibía tonos de color y los relacionaba con música. De ahí que las impresionantes vidrieras de la Sainte-Chapelle y la Catedral de Chartres fuese una fuente de sensaciones para él. Esos torrentes de colores junto con las palabras de la Biblia y de otros escritores católicos dieron lugar a esta obra que es poderosísima y fabulosa. Además de distintos motivos que "describen" esos vidrios de colores y distintas imágenes de Cristo. Los cantos de pájaros tan queridos por Messiaen también están presentes, sobre todo en las maderas. En la cuarta sección, los tam-tams resuenan para indicar la resurrección de Jesús y la llegada a la gloria. Una obra que, la escuches cuando la escuches, no te va a dejar indiferente.

Las partes de esta obra son:

1. Des profondeurs de l'abime, je cris vers toi, Seigneur: Seigneur, ecoute ma voix! ("Desde las profundidades del abismo a ti clamo, Señor: ¡Señor, escucha mi voz")
2. Le Christ, ressuscité des morts, ne meurt plus; la mort d'a plus sur lui d'empire. ("Cristo, resucitado de entre los muertos, la muerte ya no tiene dominio alguno sobre él.")
3. L'heure vient ou les morts entendront la voix du fils de Dieu. ("Llega la hora en la que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios.")
4. Ils ressusciteront, glorieux, avec un nom nouveau. ("Resucitarán, gloriosos, con un nombre nuevo.")
5. Et j'entendis la voix d'une foule immense. ("Y oí la voz de una gran multitud.")

La interpretación es la de la Orchestre Philharmonique de Radio France dirigida por Myung-Whun Chung.

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