¡Feliz sábado! Si mis cuentas no fallan (y a veces lo hacen, y mucho) el joven compositor de hoy nunca había aparecido por este humilde blog. La música suya que vamos a escuchar también es muy sencilla, pero nos va a servir para hacer una pequeña parada en este día.

Nos visita hoy Vidas Pinkevicius (1976), compositor lituano nacido en Klaipeda. Se graduó en la Academia Lituana de Música y Teatro de Vilna, especializándose en música para órgano. También ha perfeccionado sus estudios en Estados Unidos (concretamente en Michigan y Nebraska). Es un especialista en el órgano y lo combina con su otra afición que es ser bloguero. También dirige conjuntos corales y es profesor de música y ha llegado a tocar con la Orquesta de Cámara de Lituania. Ha participado en diversos festivales de órgano y ha impartido clases magistrales en varios lugares europeos. En fin, totalmente volcado en la cultura musical de su país siendo un gran animador de la misma.

Escuchemos su breve Ave Regina coelorum, op. 74. Se trata de una brevísima meditación para órgano en la que claramente suena el canto llano de esta antífona mariana (propia de este tiempo litúrgico). La registración también forma parte de la composición, ya que los que el compositor elige no hacen sino reforzar esa bella melodía gregoriana.

La interpretación es del propio compositor al órgano.