Viajando por Brasil

¡Feliz viernes! Para este último día de la semana laboral (si tienes el privilegio de disfrutar de fin de semana) te propongo un viaje maravilloso. ¿Qué te parece? Evidentemente será un viaje musical y con una música que tiene un sabor especial, como no podía ser menos. Ya te he comentado en el título que nos vamos a dirigir a Brasil así que si has atado cabos seguro que sabes a qué compositor te traigo hoy. ¿O no?

Para ese viaje vamos a hacer uso de la Bachiana Brasileira n.º 2. Con este título quiso reflejar un vínculo entre la música brasileña y la genial obra de Bach. De esa sabiduría y su mano maestra surgió esta obra, orquestada para diez instrumentos de vientos, cuerdas, piano, celesta y percusión (con cuatro instrumentos brasileños: ganzá, chocalhos, matraca y recoreco). De toda la serie de "Bachianas Brasileiras" es la más popular porque incluye música descriptiva. Villa-Lobos se quiere fijar aquí en diversas zonas de su país natal así como de sus gentes. Curiosamente, el maestro da un título doble, con una parte que se amolda más al estilo de Bach y otra suya propia. Escucharemos formas populares de tocar la guitarra, excitantes ritmos de la parte norte del país y también la descripción de lo que sería un viaje en tren por ese bello lugar, con una música alegre y llena de optimismo. La composición fue escrita en 1930.
Las partes son:
1. Preludio (O canto do capadocio).
2. Aria (O canto da nossa terra).
3. Dansa (Lembrança do sertão).
4. Toccata (O trenzinho do caipira).
La partitura de esta bella obra puedes conseguirla aquí.
La interpretación es de la Orquesta Sinfonía de Nashville dirigida por Kenneth Schermerhorn.