No es que me haya vuelto un restaurador de repente, no. A pesar de todo, y siguiendo con el símil culinario, dado que estamos en fechas algo calurosas aquí en España, igual que las ensaladas son algo fresco y muy apetecible en días de canícula, la música de hoy también tiene esa frescura que te deleitará y te sorprenderá por lo variada que es.

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Hoy, el maestro que nos sale al encuentro es Mateo Flecha el Viejo (?1481-?1553), catalán nacido en Prades. Fue cantor de la catedral de Lérida en la que luego fue maestro de capilla. Posteriormente pasó a ocupar el mismo puesto en Sigüenza y Arévalo, aquí al cargo de la capilla musical de las infantas María y Juana de Castilla.

Si hay algún género en el que destaca Mateo Flecha en el de las Ensaladas. Igual que el plato gastronómico, en el que se mezclan ingredientes, sabores, olores, etc. en una ensalada musical se dan cita toda clase de melodías, imitaciones, ritmos, etc. Además, no solo se usan músicas del propio Flecha sino de otros compositores, melodías populares.Todo a modo de un revuelto en el que los fragmentos no están para nada deslavazados sino puestos para deleite del púbico. Además, es tarea de los intérpretes hacer de las ensaladas algo atractivo y agradable de escuchar.

De Mateo Flecha se conocen 10 ensaladas, de las cuales hoy te traigo la titulada La Justa. Según Joseph Romeu, las ensaladas fueron compuestas para las fiestas navideñas, en las que de forma alegórica se describe el nacimiento de Jesús, junto con la lacra del pecado, las huestes luciferinas y, al final, el consejo moral de permanecer fiel al mensaje cristiano.

Aquí tienes esta obra interpretada de forma magistral por Hespèrion XX dirigido por Jordi Savall.