Los esclavos felices

Título bastante curioso para una obra, sobre todo por la antítesis te ser esclavo y ser feliz. Pero bueno, eran otros tiempos y había obras que se llamaban así. Hoy nos toca la sesión de música española, que esta semana todavía no te había traído nada. Nos acompañará hoy un compositor que desgraciadamente se quedó en promesa porque su corta vida no le permitió desarrollar su grandísimo talento.

Hoy te traigo la obertura de su ópera Los esclavos felices. De ella solo se conserva esta obertura y algunos fragmentos de arias. La obra tuvo una segunda revisión y analizando ambas podemos apreciar el proceso de Arriaga a la hora de componer. Se estrenó en la capital bilbaína en 1820 y posee una gran brillantez y constituye un fuerte lucimiento para la orquesta. Por lo visto los profesores del conservatorio admiraron la capacidad de Arriaga para componer una ópera llena de originalidades y con una riqueza armónica digna de un maestro, sobre todo teniendo en cuenta que por esa época Arriaga no había recibido clases de armonía.
La partitura de la obertura puedes conseguirla aquí.
La interpretación que te ofrezco es del conjunto Il Fondamento dirigido por Paul Dombrecht.