Declaró Llamazares, antiguo presidente de IU: “Ahora puedo hablar sincerarme más: me importa poco el equilibrio interno de IU”. Quiere decir que siendo el máximo responsable del partido o unión de partidos no podía ni decía lo que pensaba. Me imagino que todos los políticos que ocupan cargos de mucha responsabilidad hacen lo mismo. Se toman en serio su cargo pero, al mismo tiempo, no dicen casi nunca lo que piensan sino lo que conviene a su partido, a la empresa o a la conservación de la poltrona. “Muchas veces todos estos intereses son la misma cosa”, me dijo un político, y continuo: “Lo malo es que buena parte de las veces confunden sus intereses personales o de partido con los intereses del pueblo”