Me niego a creerlo. No puedo pensar que el obispo de Lugo, a quien conozco y aprecio, el sobrino del cardenal Rouco, responda a una pregunta relacionada con los escándalos de
abusos sexuales del clero irlandés a menores con la siguiente frase: "
La naturaleza humana es débil, frágil y tiende al pecado. Es más difícil para cualquiera conservar con claridad los principios de la moral cristiana cuando ya está tan puesta en cuestión por todas partes". A ver si la culpa de esto la tiene también Zapatero... Últimamente nos estamos mal acostumbrando a escuchar auténticas barbaridades a nuestros obispos, que posteriormente son matizadas, bien haciendo hincapié en cuestiones teológicas, bien matando al mensajero. Así le pasó a
Munilla, a Camino y a otros cuantos. Pero esto es distinto. No, no puede ser:
es imposible que Carrasco Rouco haya dicho eso... y no se haya marchado a su casa de inmediato.
baronrampante@hotmail.es