Entre las noticias de estos días, la que me ha interesado es la del nombramiento de Mons. Filippo Iannone, de la Orden del Carmen, como Prefecto de la Congregación de los obispos, una Congregación o ministerio del Gobierno Vaticano, que en varios lugares han llamado “fábrica de obispos”.
No me gusta ese nombre por periodística que parezca a no ser que se tome en sentido de humor o de reproche. Los obispos no se fabrican ni hacen (como Jesús, genitus no factus).
Ayer conté la parábola de un modo “piadoso”: Epulón, el rico del pueblo, tiene poder absoluto, con sus cinco hermanos, devoradores como él, para manejar el mundo entero, manteniendo a los lázaros p obres, fuera de la puerta del muro de su reino universal.”… Largo me lo fiais, decía en Sevilla Don Juan Tenorio.
Los ricos de la iglesia y del mundo se han empeñado en contar esta parábola como si fuera sólo piadosa y la situación del rico y el pobre sin remedio, a no ser después de la muerte, en el “infierno
El evangelio de este domingo cuenta la historia de un rico (Epulón) y un pobre (Lázaro). Unos metros se paran a uno de otro, una simple puerta de casa que puede abrirse; pero la historia corre y al fin la distancia puede ser infinita, como la que hay entre el cielo y el infierno.
Wim Weren escribió sobre este tema un comentario famoso, que aquí retomo. El domingo, si Dios quiere, escribiré mi relato. Buen fin de semana para todos. No agrandemos las distancias entre unos y otros.
Lc 16, 19-31 cuenta la historia, que se ha hecho mundialmente famosa, de Lázaro y del hombre rico. Este es el texto:
Anda el patio revuelto. Han hablado los jefes en la ONU y no se han puesto de acuerdo. Se esperan tiempos de Apocalipsis, habrá que convivir con la Bestia.
Todos hablan de la Bestia, dicen que ha llegado. Pero no todos la sitúan en el mismo mar, sobre la misma tierra
Tampoco yo puedo decir dónde está, pero he sentido algunos de sus rasgos y así los describo, después de haber leído con mucha atención el Apocalipsis y de haber recorrido algunos caminos de mar y de tierra. Esta es mi conclusión: No tenemos más remedio que convivir con la Bestia. Andemos con cuidado.
Gaza está entre Israel y Egipto. Allá en Egipto, hace unos 3.000 años gritaban, sufrían y morían los israelitas/hebreos, pobres, altivos y levantiscos, un peligro para el Faraón de Egipto, pues crecían, se vengaban y en pocos años podían tomar el poder de Egipto y expulsar a los faraones. Por eso, el Faraón decidió oprimirles, matarles poco a poco, exterminando de un modo especial a los niños: ¡Que no nacieran, que les mataran uno a uno, echándoles al Nilo
Nombre. En hebreo se escribe מתתיהו Matityahu, de la raíz Natán (נתן dar) Yahw (יהוה Yahveh). Significa don de Dios. Aparece en las listas de apóstoles cuando Jesús lo llama para que lo siga, y cuatro veces más (cf. Lucas 6:15; Marcos 3:18; Mateo 10:3 y Hechos 1:13. Significativamente, en Mc 2, 14 aparece con el nombre de Leví, Levita, uno de los hijos de Jacob.
Fuera del NT aparece como evangelizador en una zona del norte, entre el Ponto y Persia. Se le atribuyen varios evangelios apócrifos, entre ellos uno de la Infancia, que fue muy conocido entre los árabes y que ha influido en el Corán. Presento aquí los relatos de su vocación y banquete en Mc y Mt, para indicar finalmente algunos rasgos de su evangelio. He dedicado casi la mitad de mi vida al estudio de Mt 25, 31-46, y aún no he terminado. Con un abrazo a Mateo, bezarkada bat zuri, Mateo
Buen ladrón no es quien pide ayuda a Cristo en la cruz tras haber robado, según Lc 23, 39-43, sino quien calcula y comparte el dinero empobreciendo a los ladrones de verdad y enriqueciendo a los pobres conforme al mensaje de la madre de Jesús (Magníficat: “A los pobres los colma de bienes, despide vacíos a los ricos”: Lc 1, 51-53).
Este es el pasaje más enrevesado y rico del NT, el evangelio del “Domingo del buen ladrón” (Lc 16, 1-13), obra de arte literario y dinamita teológico. Quien pueda entender que entienda (Mt 11, 15).
No sé si he logrado explicarlo bien, según el comentario que vengo escribiendo de Lucas y los libros que he dedicado al dinero en la Biblia. No todos lo interpretan igual, ni dentro ni fuera de la iglesia. Nuestro futuro en la tierra depende de la forma que tengamos de cumplirlo.
He dicho que es enrevesado, digo ahora que es luminoso. Empieza con la parábola del justo/injusto administrador. Termina con la sentencia suprema: “No podéis servir a Dios y al dinero”. No es para "bandidos" de la Sierra Morena o Rubia, pero puede parecerlo. Buen día a todos, este Domingo del Buen Ladrón.
El AT puede titularse Libro de las guerras de Yahvé (Núm 21,14), y trata, en pare, Yahve-Yahú. Dios guerrero con sus luchas, empezando en la conquista de la tierra, como invasión, emigración y/o revolución.
Aquella conquista nos sitúa ante la inmensa ambigüedad de la Biblia israelita. (a) Por un lado, presenta la tierra es don (regalo) de un Dios guerrero, como los dioses de los pueblos del entorno (moabitas, filisteos, sirios…). (b) Por otro lado, la conquista de esa tierra es resultado de una serie de pactos y guerras de las tribus de Israel, pero también de una inmensa generosidad humana. según las tres hipótesis que siguen:
Por la Biblia, y por textos de su entorno, sabemos que en Oriente (Fenicia, Siria...) había (lo mismo que en Israel) hombres sagrados que anunciaban sus oráculos en nombre de Dios o del poder (Espíritu) divino: profetas de Mari, videntes de Canaán, antiguos “derviches” y guerreros de Dios (cf. 1 Re 18,25 ss o Is 28,7) ss. como los “asesinos” ("hashashin", ismaelíes, sagrados de la edad media). Actualmente han vuelto, en Israel y su entorno, en cuatro de las cinco partes del mudo, como si la vida fuera secundaria, la guerra necesaria
Tres principales... y además la nuestra, la de nuestro tiempo, con la guerra de Jerusalén y Gaza. Para reflexionar sobre el tema del evangelio de hoy: Jesús y la serpiente de Moisés, elevada en el desierto.
Este motivo c (=no es el hombre para el templo, sino el templo para el hombre, Mc 2, 27) está en el fondo de la epístola (Flp 2, 6-11) y del evangelio de este domingo (Jn 3, 3, 13-17), que corresponde a la fiesta litúrgica de la “exaltación” de la Santa Cruz (14.9.25), la Cruz de Septiembre.
Con este motivo ofrezco un comentario de Flp 2, 6-11, que es quizá el texto más importante de la liturgia y teología cristiana. Éste es el evangelio en estado puro, evangelio de cruces en Gaza, Ucrania y medio mundo, todas ellas Santa Cruz de Dios en Cristo y en los hombres.
Esta era la conclusión del evangelio de Lc 14, 28-33 (domingo 7.9.25), que comenté en FB y en RD:: construir torres, ganar guerras, pero abandonar a Cristo.
La iglesia ha construido millones de torres y ha ganado miles de guerras, pero ha perdido (está perdiendo) Jesús) pues, en general, no ha dejado sus torres y sus guerras bienes para andar con él.
El tema es importante, el centro del cristianismo, por eso quiero volver al plantearlo.
Si un rey quiere declarar una guerra, si un rico quiere construir una torre han de empezar calculando los costes de la empresa, en clave de soldados y dinero. Pues bien, de un modo abrupto, rompiendo esa lógica, de tipo utilitario, Jesús afirma que, para ser discípulo suyo, en camino de Reino hay que renunciar a todos los bienes (cf. motivo de Lc 12, 33 y 18, 22).
El libro de los salmos, manual básico de canto, poesía y oración, fue compuesto entre el VIII y el II a.C. y codificado en el templo de Jerusalén. Sigue siendo hasta hoy el “texto” fundamental de alabanza y pacificación humana de la cultura de occidente.
En estos momentos de intenso desasosiego, de guerra universal, de amenaza y mentira de los “grandes” (=malvados) poderes, especializados en crear miedos de espadas y fuegos, para seguirnos mintiendo y decirnos después que ellos pueden salvarnos del miedo y librarnos del fuego, si pagamos la tarifa estipulada y nos sometemos a su espada, es bueno parar y sosegarnos, recreando en nuestra vida la voz de algunos salmos.
Retomo el evangelio de ayer (31.8.25, dom 22 TO, Lc 14), con el que exponía una tabla de “hambres bíblicos” del mundo. Hoy expongo, a partir de Prov 25, el tema de fondo, centro del evangelio y de todas las guerras del mundo. No hay en ese pasaje ninguna palabra sobre Dios, pero todo trata de Dios. Todo es política, cuestión de familia/sociedad humana, amenaza de muerte con infierno si mantenemos el mismo camino.
31.8.25. En un mundo en el que sobra dinero y alimentos mueren de hambre miles de personas cada día, por mala distribución y por cuestiones político-militares y sociales, como las de Gaza, Sudán y otras regiones.
En ese contexto resuena como voz de alarma, denuncia y llamada al compromiso este evangelio
La elección del papa León XIV, religioso y pensador agustino, nos invita a evocarla figura y obra de San Agustín en la iglesia.
Agustín es, quizá, el mayor pensador de la iglesia occidental, l anterior a la Reforma Protestante, venerado por católicos y protestantes, admirado aunque menos seguido por los ortodoxos. Así le quiero presentar como pensador clave para el siglo XXI, no para seguirle al pie de la letra, sino para replantear a su lado, con valentía y libertad, la temática actual de la sociedad y de la iglesia.
Texto tomado básicamente de Pikaza, Patrística (Clie 2022) y de Diccionario Pensadores Cristianos. Mapa del entrono de Annaba/ Hipona, con ruinas de Hipona, junto a Túnez (hoy Argelia)
Iglesia es familia: curar a los padres; abrazar, bendecir y cuidar a los niños
Acercaban niños a Jesús para que los tocara, pero los discípulos les regañaban. Al verlo, Jesús se enfadó y les dijo: "Dejad que los niños se acerquen a mí: no se lo impidáis; de los que son como ellos es el reino de Dios. Os aseguro que el que no acoja a Dios como un niño, no entrará en Reino de Dios. Y los abrazaba y los bendecía (les concedía autoridad) imponiéndoles las manos.
El evangelio de este dominio (24.8.25) recoge, en el contexto de la gran subida a Jerusalén, iniciada en Lc 10, 51, una serie de dichos relacionados con la salvación. El texto ha sido retocado por el mismo Lucas, con materiales que provienen de la tradición del Documento Q (recogidos por Mateo en otro contexto: Mt 7, 13-14. 21-23).
Tratan de la salvación, entendida en sentido fuerte y así quiero comentarlos hoy, de un modo sencillo, aplicándolos a nuestra situación social y eclesial.
Uno le preguntó: "Señor, ¿serán pocos los que se salven?" Jesús les dijo: "Esforzaos en entrar por la puerta estrecha. Os digo que muchos intentarán entrar y no podrán…. (Lc 13, 22-30).
Esa pregunta y tema no se refiere sólo a la salvación eterna de las almas tras la muerte (tema que dejamos ahora en manos de la misericordia de Dios?, sino a la salvación y vida de los hombres en este mundo, tema clave de la apocalíptica judía y de la realidad actual del mundo, presa de fuegos terroríficos (calentamiento global, incendios pavorosos) y de guerras peores que diabólicas en varios lugares del mundo, pues los diablos que yo he conocido estudiando la Biblia y la historia de las religiones son mejores que muchos de traje y corbata, sin cola externa, que andan gobernando este mundo, en nombre de sus dioses falsos.