Se nos asegura que es cuestión de días se haga público el nombramiento de nuevo obispo de Coria-Cáceres en la persona del actual vicario general de Toledo Juan Miguel Ferrer.
Desde luego su nombre era de los que más sonaban de un tiempo a esta parte entre los sacerdotes abocados a una mitra. Si se confirmase la noticia estaríamos ante una jugada magistral de Don Antonio Cañizares. No se puede apagar más habilmente el tema Guadalupe. Un hijo de la villa del monasterio de obispo auxiliar de Toledo y un toledano de obispo extremeño. Verdaderamente es un genio el pequeño Ratzinger. Será corto de talla física pero es largo cantidad.
Una vez más el cardenal de Madrid y el cardenal primado han ido juntos, siempre en el caso de que se confirme la noticia, y el tandem funcionaría con precisión de reloj suizo. Y así como tuvimos la invasión episcopal che ahora toca la "toledana". No quiero decir con ello de nacidos en Toledo, que algunos lo son, sino de formados en Toledo. Cuando esto escribo estoy viendo, en el cielo, la sonrisa abierta del gran Don Marcelo. Todo lo que se le negó en vida está dando frutos hoy. Y qué frutos. Don José Ángel, Don Jesús, Don Demetrio, Don José Ignacio... Ojalá Don Juan Miguel sea un "toledano" más.
Me alegraría infinitamente la confirmación de la noticia. Vaya repoker toledano íbamos a tener. Me parece, mi queridísimo Don Marcelo, que voy a dejar de decir eso que tantas veces te dije desde que nos has dejado: ruega por nosotros. ¿Para qué? Si lo estás haciendo todos los días...