LOS SACERDOTES CASADOS, SIGNO DE LOS TIEMPOS II

¿ Este respeto santo a la conciencia brilla en el epílogo de J. M. Castillo: "Siento profunda admiración hacia quienes un día tomaron la decisión de reorientar sus vidas aun a costa de abandonar el ejercicio del ministerio sacerdotal... Estos hombres han tenido la libertad y el coraje de tomar la propia vida en sus propias manos, para conducir esas vidas como ellos veían que era lo que más y mejor cuadraba con su propia humanidad...


La tarea fundamental, lo mismo de los ministros de la iglesia que de los laicos, es encontrar cada cual según sus posibilidades y sus condicionamientos, el camino más pleno de su plena humanización. Solamente así, y por este camino, podemos encontrar a Dios, al Dios trascendente y divino que se nos da y sale a nuestro encuentro en lo inmanente y humano" (Epílogo de "Curas casados. Historias de fe y ternura". Pág. 339-355).

Antes, otro valiente cristiano había expresado la misma libertad sobre la "descabellada institución del celibato obligatorio de los obispos y presbíteros. La llamo descabellada, porque la experiencia histórica demuestra que es una cabezonería humana en que el Espíritu Santo no ha entrado, y que, por eso, siempre funcionó a trompicones... Bastantes curas, que actúan rectamente en conciencia, no se sienten ligados delante de Dios por una disciplina que vulnera derechos fundamentales del hombre. (...)


Fragmento de Rufo González de R.D.



José María Lorenzo Amelibia
Si quieres escribirme hazlo a: jmla@jet.es
Puedes solicitar mi amistad en Facebook pidiendo mi nombre Josemari Lorenzo Amelibia
Ver página web: http://web.jet.es/mistica
Volver arriba