TETIMONIO Dejo de ser clérigo: siempre seré sacerdote
Espíritu y realidad
Soy consciente desde primeras horas de la mañana todos los días de que estamos en tiempo de Adviento, de preparación para la Navidad. En este Adviento, Señor, quiero seguir tu inspiración, tu providencia que me guía por un camino distinto del clero. Contigo tengo una gran amistad, Señor. Por tu amor deseo y te pido amar a todos mis semejantes. Que me dé cuenta de que el amor de amistad con cuantos se acercan a mí, es verdadera caridad.
Los domingos se me hace raro. Antes era el día de mayor ocupación; ahora, no. Egaña, el director, me dice que vaya a ver a jugar al fútbol a los chicos del San Ignacio. ¡Menuda penitencia hubiera sido...! Yo no me aburro. Celebro la misa en privado y tengo muchas aficiones de tipo intelectual que me llenan. Además he de atender a mi madre, que vive conmigo. También salgo con el coche y me doy paseos. Los días laborables me relaciono con alumnos y compañeros y me llevo bien con todos.
Siempre la misma dualidad. Por una parte no poder vivir sin el amor humano, y por otra sentirme sacerdote, gustar del sacerdocio no sólo en su ejercicio, sino en su vida mística. ¿No se darán cuenta de que lo importante para el sacerdote no es ser célibe, sino ser santo?
Visita inesperada
Vino ex profeso un compañero sacerdote a decirme confidencialmente:
- ¿Qué razón de ser tiene el sacerdocio? No veo el fin específico de él. Tú lo has dejado: cuántos vegetamos... apenas se pude ya hacer nada.
- Amigo, ¿ya haces oración?
- Bah, la vida es oración. Cuando trato con el prójimo, trato con Dios.
- Creo que si uno vive en el sacerdocio, ha de procurar la intimidad con Jesús en la Eucaristía. Y eso incluso aunque el cura fuese casado.
- Pues yo no sé si dejarlo.
- Te aconsejaría que si tu psicología no puede vivir el celibato, lo dejes. Pero si se trata de ponerte a tono, practica con fervor unos ejercicios espirituales.
Aquel compañero pronto lo dejó todo. ¿Quién me iba a decir entonces que a lo largo de mi vida me iba a tocar ayudar a continuar en el clero o a secularizarse a tantos sacerdotes? Sin pretenderlo, ha sido mi especialidad sacerdotal posterior.
José María Lorenzo Amelibia
Si quieres escribirme hazlo a: josemarilorenzo092@gmail.com
Mi blog: http://blogs.periodistadigital.com/secularizados.php
Puedes solicitar mi amistad en Facebook pidiendo mi nombre Josemari Lorenzo Amelibia
Mi cuenta en Twitter: https://twitter.com/josemarilorenz2