Fernando Karadima, el sacerdote condenado por el Vaticano tras ser acusado de abusos sexuales a menores, se encuentra ingresado en estado grave, después de sufrir un infarto.
El que fuera párroco de El Bosque fue internado de urgencia en el Hospital Clínico de la Universidad Católica el viernes pasado, tras sufrir problemas cardiacos, que obligaron a intervenirlo para realizarle un bypass.
La información fue confirmada este martes por el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, quien comentó que "es lo que le pasa a todas las personas que somos humanos, que de repente nos enfermamos y tenemos que ir al hospital. Está controlado".
Karadima había sido cambiado de residencia en mayo pasado, siendo trasladado a un Hogar de Ancianos San José, de las Religiosas de la Congregación de Santa Teresa Jornet, en Lo Barnechea.
(RD/Agencias)