Arranca en México el IV Congreso Mundial de Exorcistas "Los matrimonios homosexuales son una tentación del diablo"
"Los matrimonios homosexuales y la posibilidad de adopción son una tentación del diablo", aseguró anoche el coordinador del IV Congreso Mundial de Exorcistas -que arrancó en México-, Pedro Eusebio Mendoza. El religioso subrayó que "las tentaciones que presenta el diablo son el poder, el dinero y el placer, lo que esta apartando a los hombres incluso de las leyes naturales como se está viendo con los matrimonios homosexuales y su posibilidad de adoptar".
El encuentro, que en estos días se dirige a laicos y personal sanitario y que tendrá su espacio para sacerdotes a partir del 24 de agosto, fue inaugurado por el obispo auxiliar de Ciudad de México, Florencio Armando Colín, quien recalcó que en los últimos 20 años sólo se han practicado cinco exorcismos en el mundo, aunque dijo que una posesión no "está ajena de que pueda ocurrir".
El prelado destacó la necesidad de formar a especialistas que sepan diferenciar entre una persona "poseída" y una que vive "inmersa en la opresión". "En ambos casos se requiere de atención y sanación espiritual", añadió, el prelado, quien insistió en que la lucha contra el maligno "no solamente es tarea de los religiosos, sino también de todos los creyentes; que sepan cómo atacar a los tenebrosos oficios del mal. Pero sólo se puede a través de conocer bien las estrategias para combatirlo".
El IV Congreso Mundial de Exorcistas cuenta con dos grupos, uno integrado por principiantes en el tema y compuesto por sacerdotes, médicos, psiquiatras y laicos; y el segundo lo forman sacerdotes y seminaristas que ya han tenido experiencia con los diferentes rituales de expulsión del demonio o en sanaciones para sacarle el mal a la gente.
El coordinador del mismo, padre Mendoza, insistió en su alocución en que "la homosexualidad y el lesbianismo son fruto de un desorden provocado en la naturaleza por la acción del hombre". Junto a estas tentaciones, los expertos condenaron el narcotráfico como "manifestación de lo maligno", puesto que realiza acciones que van en contra de la dignidad, de la moral y de las leyes. También lo son la adivinación, la astrología y el espiritismo, formas de "abrir la puerta al diablo".
(Rd/Agencias)