Preces de los Fieles (D. 1º Cuaresma C 14.02.2016)
“No perdamos este tiempo de Cuaresma favorable para la conversión... La Cuaresma de este Año Jubilar es para todos un tiempo favorable para salir de nuestra alienación existencial gracias a la escucha de la Palabra y a las obras de misericordia”, nos dice el mensaje cuaresmal del Papa Francisco.
Pidamos incorporarnos a la práctica cuaresmal diciendo: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por la Iglesia:
- que escuche y viva mucho la misericordia divina;
- que, como Cristo, sea “el rostro de la misericordia del Padre”
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por los servidores de la Iglesia (obispos, presbíteros, diáconos, catequistas...):
- que abandonen “los ídolos del saber, del poder y del poseer”;
- que no dominen, ni impongan, sino que ofezcan su servicio en fraternidad humilde.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por nuestra sociedad:
- que no adore el dinero, el poder, el saber;
- que busque el bien de todos, especialmente la vida de los más débiles.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por nuestro pueblo:
- que no seamos indiferentes a la dicha o desgracia de nuestros paisanos;
- que miremos los unos por los otros, sobre todo por las pobres.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por los gobernantes civiles:
- que sean honrados, trabajen por el bien común;
- que sepan unirse, destierren el odio y la violencia.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por esta celebración:
- que nos ayude a conocer nuestras tentaciones e inclinaciones negativas;
- que nos haga sinceros, buscadores del bien para todos.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Necesitamos, Señor, sentir tu misericordia entrañable.
Queremos que tu Espíritu nos fortalezca para poder cambiar nuestra vida y la vida del mundo.
Ilumina nuestra cuaresma con tu palabra y con tus obras de misericodia, Jesús, hermano de todos, que vives por los siglos de los siglos.
Amén.
Rufo González
Pidamos incorporarnos a la práctica cuaresmal diciendo: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por la Iglesia:
- que escuche y viva mucho la misericordia divina;
- que, como Cristo, sea “el rostro de la misericordia del Padre”
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por los servidores de la Iglesia (obispos, presbíteros, diáconos, catequistas...):
- que abandonen “los ídolos del saber, del poder y del poseer”;
- que no dominen, ni impongan, sino que ofezcan su servicio en fraternidad humilde.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por nuestra sociedad:
- que no adore el dinero, el poder, el saber;
- que busque el bien de todos, especialmente la vida de los más débiles.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por nuestro pueblo:
- que no seamos indiferentes a la dicha o desgracia de nuestros paisanos;
- que miremos los unos por los otros, sobre todo por las pobres.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por los gobernantes civiles:
- que sean honrados, trabajen por el bien común;
- que sepan unirse, destierren el odio y la violencia.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Por esta celebración:
- que nos ayude a conocer nuestras tentaciones e inclinaciones negativas;
- que nos haga sinceros, buscadores del bien para todos.
Roguemos al Señor: “renuévanos, Señor, con tu Espíritu”.
Necesitamos, Señor, sentir tu misericordia entrañable.
Queremos que tu Espíritu nos fortalezca para poder cambiar nuestra vida y la vida del mundo.
Ilumina nuestra cuaresma con tu palabra y con tus obras de misericodia, Jesús, hermano de todos, que vives por los siglos de los siglos.
Amén.
Rufo González