Voy a un partido y no grito porque nada de lo que pasa en el campo me emociona. Lo siento, me gustaría ir a ver un partido y desgañitarme. Del fútbol me interesan los arrabales, los meandros. “El Real Madrid fue un estandarte fascista”, dijo un político al enterarse que el Parlamento Europeo albergaba una exposición sobre la historia del club blanco. El político diciente hubiera dicho lo mismo de haberle ido mejor a su partido en las últimas elecciones municipales? ¿Busca el partido del político diciente promover y fomentar el deporte, izar una bandera catalana, resaltar el hecho diferencial catalán cuando se baten por poner en pie una selección catalana de fútbol? Puede que los políticos a quienes pagamos todos hubieran podido hacer cosas más importantes para los intereses de los ciudadanos europeos pero también puede que los políticos que los ciudadanos eligen no estén preparados para hacer nada más importante o estén tan preparados que con ello quieren estafarlos.