Disertó sobre Juan de Palafox, que será beatificado en mayo de 2011 Cañizares: "Palafox sería hoy un gran defensor de los más débiles, que son los no nacidos"
El cardenal Antonio Cañizares Llovera, prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos en Roma, participó ayer en Fitero en el ciclo "Los viernes palafoxianos", centrados en la figura del obispo Juan de Palafox al cumplirse 410 años de su nacimiento en la villa y con motivo de su beatificación en mayo de 2011. Cañizares ofreció una charla ante unas 170 personas en la que, bajo el título "Palafox, pastor de almas", desglosó la figura de Palafox, que fue obispo de Puebla de los Ángeles (México) y de Osma. Lo entrevista DN en Diario de Navarra.
¿Cómo valora el ciclo que se ha organizado en Fitero sobre Palafox?
Me parece que es una muestra de la gratitud que tiene Fitero hacia él. También es una muestra del aprecio que merece para los fiteranos toda la figura gigantesca del Venerable Palafox. Además, es otra realidad, es el vínculo que le une a la historia de santidad en la iglesia: San Raimundo de Fitero, Venerable Palafox y, posiblemente, pronto también veremos en los altares a don José María García de la Higuera -ordenó a Cañizares-. Toda una historia que está jalonada por la santidad, y en definitiva, por la fe en Dios.
¿Qué le interesó de Palafox?
Los grandes evangelizadores de los siglos XVI y XVII en América siempre me han atraído notablemente. Ricardo Fernández y Jorge Fernández Díaz me interesaron todavía más por Palafox.
¿Qué destacaría de Palafox?
Su pobreza, su amor a los pobres, su compasión y defensa de los indios. Y eso sencillamente porque en esa pobreza suya, en esa radicalidad del seguimiento del Jesucristo no tiene más que Dios. Sólo Dios es necesario. No le preocupan los bienes materiales.
¿Qué serviría de ejemplo de su figura en la vida actual?
Todo, pero de una manera muy singular ese reconocer que todo viene de Dios y ese volcarse en favor de aquellos que no le pueden devolver nada a cambio salvo el cariño, la gratitud del amor mismo.
¿Algún ejemplo concreto?
Hoy se sentiría también padre de los más desgraciados y estaría juntamente con ellos. Hoy el Venerable Palafox sería, por ejemplo, un gran defensor de los más débiles e indefensos, que son los no nacidos.