La estupidez de las apostasías.

Algunas personas, que de católicas no tienen nada, pretenden ser borradas, como apóstatas, de los registros de la Iglesia. Y hay quien se hace eco de eso como si tuviera mucha importancia.

Y hasta se pretende traer a las matemáticas en apoyo de las apostasías. En un año se multiplicaron por seis. ¡Qué barbaridad! ¡La Iglesia se hunde!

Si la fortuna de Don Emilio Botín se multiplicara en un año por seis sería un incremento notabilísimo. Pero si un mendigo tuviera un euro, tal multiplicación haría que tuviera seis. Ni para almorzar de menú en uno de los más baratos.

Pûes con las apostasías ocurre como con el mendigo. Con toda la propaganda a su favor pasaron de las 46 del 2006 a las 287 del 2007. O sea, nada.

Los registros no son borrables. Quien ha sido bautizado en la Iglesia católica tiene que seguir figurando como tal porque ese hecho puede tener consecuencias posteriores. Caso de que quiera después de apostatar casarse por la Iglesia, hacerse sacerdote... Que todo es posible. Pues al igual que se apostata se desapostata. Y la gracia de Dios no es previsible.

Además la Iglesia no tiene la menor culpa del hecho del bautizo. Los culpables en todo caso serían los padres del apóstata.

Todo el que quiera apartarse de la Iglesia es muy dueño de hacerlo. Hay miles de casos. Si además tienen el prurito de hacerlo ostensible pueden ponerse una camiseta que diga yo soy apóstata, declararlo a los amigos y hasta aparecer en algún medio de comunicación diciéndolo.

Borrarle del libro de bautismos supongo que no lo conseguirán. Y solicitar una anotación marginal de apostasía es una estupidez que no sirve para nada. Porque del mismo modo que pueden lograr eso después de un tiempo pueden también solicitar que se borre.

Si un vasco abertzale quisiera borrarse del Registro civil por ser de los españoles no lo va a conseguir. Tal vez, y a fuerza de dar la lata, tal vez logre una anotación marginal que diga que ese sujeto manifiesta que no se siente español. Y nada más.

Ahora, si en esta bajada general de pantalones se llegara a poder desaparecer de los Registros yo solicitaría inmediatamente que me borraran del de Hacienda.

Lo dicho, una estupidez.
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