Instrumento de tu Paz

Es una oración querida para mí, que en ciertos momentos me acompaña en la oración pero que también clama en mi interior, en lo que vivo y lo que he de saber vivir. Cuando el alma anda alborotada, la intranquilidad hace acto de presencia… hay que paliar y buscar pacificar el alma y seguir alimentando el espíritu.
Le pido al Señor que haga de mí un instrumento de su paz, no para encontrar la paz del que se encuentra bien, sino la Paz que alimenta el alma y es ahí donde descubro que necesito impregnarme de su Paz para ir haciendo bien en la vida, para saber hacer de esta oración un instrumento de verdadera paz, de poner siempre lo constructivo por encima de todo, de saber alentar la vida a través del Amor, del Perdón, de la Armonía, de la Verdad, de la Fe, la Esperanza, de la Luz, etc.…, de ser capaz de ver al otro, escucharle, acogerle, acompañarle, estar disponible, ser capaz de ir sin esperar a que vengan a mí.
Descubrir lo que el Señor nos pide en distintos momentos o circunstancias, sencillamente en nuestras vidas y aunque a veces nos pueda resultar complicado, pero siempre espera que nos demos, que vayamos mas allá. Señor, sí, quiero dejarme hacer por ti para ser instrumento de tu Paz, que sepa poner la mejor parte de mí para mejor saber dar. Texto: Hna. Ana Isabel Pérez.
¡Señor,
haced de mi un instrumento de Vuestra paz.
Que ahí donde haya odio,
ponga yo amor;
que ahí donde haya ofensa,
ponga yo perdón;
que ahí donde haya discordia,
ponga yo armonía;
que ahí donde haya error,
ponga yo verdad;
que ahí donde haya duda,
ponga yo la fe;
que ahí donde haya desesperación,
ponga yo esperanza;
que ahí donde haya tinieblas,
ponga yo la luz;
que ahí donde haya tristeza,
ponga yo alegría!
Oh divino maestro,
que no me empeñe tanto en ser consolado
como en consolar;
en ser comprendido