La fidelidad del Señor
Dios no retirará su favor a David y su linaje será perpetuo. Si no son fieles a la alianza él los castigará pero no les retirará su favor (cf. vv. 31-38).
Pero en un momento de la historia del pueblo de Israel parece que Dios se ha olvidado de su promesa por ello el autor del salmo hace memoria a Yahvé de su promesa: “Pero tú, encolerizado con tu Ungido, lo has rechazado y desechado; has roto la alianza con tu siervo y has profanado hasta el suelo su corona; has derribado sus murallas y derrocado sus fortalezas” (v. 39-41). La forma tan coloquial de reclamar a Dios y hacerle memoria de sus promesas, demuestra la confianza de este judío. Él esta seguro de la fidelidad del Señor, ésta no puede fallar por esto se encara con Dios.
Es un buen salmo para meditar en nuestros momentos de zozobra y oscuridad: La fidelidad del Señor dura siempre. Texto: Hna. María Nuria Gaza.