Jubilada analfabeta aprende a leer en tres meses

Hace dos meses me presentaron a Elena, jubilada que, con urgencia, quería aprender a leer. En su familia de origen el nivel cultural había sido nulo. Pero, en su familia actual, esposo e hijos han realizado estudios superiores. Intentó Elena repetidas veces acceder al aprendizaje de la lectoescritura más elemental. Pero, o acudió al aula que no le correspondía, o se desanimaba al ver que no avanzaba (probablemente por problemas disléxicos no diagnosticados). Me he comprometido a ayudarla. Y la aseguré, para estimularme y estimularla, que el 1 de enero de 2007 habrá aprendido a leer correctamente. Que Dios me oiga.

Estamos trabajando en dias laborables, una hora diaria. ¿La metodología? Hace 28 años asistí en Madrid a un curso de dislexias dirigido por el maestro nacional don Antonio Muñoz Angosto, creador de un original método de lectoescritura que titulaba "Mi juego de flechas". Adquirí todo el material y, subvencionado por Cajamadrid, he experimentado con un grupo de niños de siete años con problemas, y con varias personas mayores.

Sospechaba ya don Antonio que la lectura global fomentaba la dislexia, y creó un instrumento de lectura sintética, letra a letra (al que parece que se está volviendo). La forma de cada letra se asocia con un objeto: la v con un vaso, la p con una pera, la b con una bota... (ver dibujo).

La primera letra de la sílaba se clava, como una flecha, en la siguiente. Así: en sa, la s.... (se prolonga su sonido) se clava en la a(ssssssá). Este sistema es complejo y, además, ya no puede adquirirse, según creo. Pero funciona.Es aburrido, pues no se tiene en cuenta el significado de las palabras... Pero funciona. Y lo estoy intentando una vez más con esta voluntariosa fémina que, a falta de un mes, ya juega con su marido en traducir (leer) palabras del cuadernillo de publicidad de un supermercado que le han dejado en el buzón, y está muy emocionada con cada acierto. La motivación que no encuentra en la sequedad del método de don Antonio, la descubre jugando a leer sílabas/palabras en la vida...

Se me olvidaba. No la enseño a escribir. Pienso que leyendo mucho y con el ordenador, podrá enviar emails mejores que los jovencitos de hoy de taquigrafía marciana... Al fin y al cabo no es ningún disparate escribir fonéticamente (el disparate es la ortografía, hay que humanizar la gramática). No nos riamos de Juan Ramón Jiménez cuando escribía, por ejemplo, "ánjel". No le han seguido, pero tenía razón.

Y termino invitando a una sonrisa. Para que se le grabara en las neuronas que la letra b es la letra de la bota, la llevé a mi web Nido de Poesía y le abrí la página del "Villancico del futbolista", donde la b de futbolista da un patadón a la o como si fuera un balón. Asómate aquí.

En enero os referiré el final de la pequeña gran historia de Elena.
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