El oficio de profesor tiene también su cara amable. Ellos son jóvenes... Yo también... Suele acompañar a la regresión biológica de la madurez un rejuvenecimiento interior, fruto de la experiencia reflexionada, de una visión del mundo más integrada, esencialista, solidaria, viva y eficaz. Partiremos, en nuestro viaje, de una inquietante descripción corporal, que se irá enriqueciendo inventariando niveles secretos de realización personal...
Me veis con gafas gruesas y dientes plateados.
Aquel cabello de oro y olas divertidas
hoy es playa desierta, arena calcinada.
Contempláis mis oídos en palmar trompetilla,
navegáis con respeto por mis mares de arrugas,
y decís: ¡Ha colmado medio siglo de vida!
Lo digo con orgullo: tengo cincuenta años,
y me llaman algunos Maestro. En mi cocina
aderezo sabores de tres licenciaturas
con el limón dorado del vivir cada día.
Mi corazón es joven: ni casi treinta años.
Siento latir a Dios en cada célula,
y en las galaxias, y en el suceso humilde.
Mi vida es un joyero de experiencias:
aquí un diamante, allí llanto de ámbar,
ayer granito, hoy rubí, turquesas...
Sueño despierto y planto lo que sueño
por jardines de luz y de belleza.
La regresión admirativa no tiene fronteras. Se adelgaza lo físico. Se expande lo espiritual.Creatividad. Alegría. Unidad. Plenitud...
Si me miráis con ojos tiernos,
aún no he cumplido quince años:
por dentro
soy volcán
de alegría. Por fuera, serio.
Mi corazón-pimpollo ¡arde!
de amores nuevos,
en esta primavera, la penúltima.
¡Llamad a los bomberos:
por mi jardín adolescente
hay fuego rosa, fuego!
Como tú, tengo sólo quince mayos
ingenuos,
me gusta la lambada, el patinaje,
Hombres G, Barón Rojo y Los Secretos,
más que libros de texto y polinomios.
Me va la marcha, coleguilla.
Pero...
Ni siquiera he cumplido siete años.
En verdad, estoy naciendo:
soy capullo regado por la aurora,
gaviota de plumón que estrena viento.
Nazco ayer y mañana: sólo soy un bebé
de manos en bisagra, ojos de terciopelo,
y el corazón que late al compás de la vida.
Hasta el último parto, en la cuna del Cielo.