La entrada en la iglesia es libre para todos Apostatar para no pagar

(Martín Gelabert).- En estos días pasados los medios se han hecho eco de un decreto de la Conferencia Episcopal alemana en virtud del cual aquellos que dejen de pagar el impuesto eclesiástico no pueden luego solicitar que les sean administrados los sacramentos.

Este es un asunto delicado y para juzgarlo con un poco de equidad conviene dejar claras algunas cosas: 1) el estado alemán recauda los impuestos eclesiásticos de todos los ciudadanos y los revierte en sus respectivas iglesias (católica o protestante); 2) en España también se paga un impuesto similar, pero el contribuyente puede escoger si prefiere que vaya a la Iglesia o a otros fines distintos de los eclesiales; 3) en Alemania (no así en España) es posible no pagar este impuesto, aunque para ello hay que hacer una declaración de apostasía.

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