Tajante. Así se mostró ayer el obispo Juan Antonio Reig Plà sobre cuál debe ser la apuesta de los feligreses de Cartagena: lograr que se reedifique Santa María la Vieja. "Que no os engañen, está catalogada como catedral y corresponde pagar su recuperación al ministerio de Cultura", subrayó en el homenaje que le dieron los marrajos en la sede de los morados. Ya lo había anunciado antes durante la misa de la ofrenda de la Onza de Oro en la iglesia de la Caridad, aunque de un modo más poético. "Cartagena no tendrá todas las heridas cubiertas mientras no se recupere Santa María", señaló, según cuenta A. Torres en La Opinión.

El obispo anunció que él ha puesto en marcha el proyecto de reedificación con el arquitecto de la Diócesis y ya sólo resta que se tome la decisión política, por lo que invitó a los cofrades marrajos a pelear por ello.

En su homilía durante la eucaristía en la que tuvo lugar la tradicional entrega de la Onza de Oro a la Patrona, por parte de la alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro, y que este año se materializó en un cheque de 32.000 euros, Reig Plà se despidió de los cartageneros. "Cartagena ha sido mi orgullo delante del Episcopado. Eran muchos los proyectos que había en mi cabeza y en mi corazón y se los confío todos a la misericordia y al buen hacer de quienes se quedan".

Dirigió "un abrazo de obispo para cada uno de vosotros y el cariño de este pastor que ha querido serviros, con todas mis limitaciones y todo mi amor" y añadió: "Uno tiene derecho a enamorarse y yo me llevó el corazón de Cartagena".

Por su parte, Barreiro pidió a la Virgen "que nos oriente para reconocer a quienes más precisan ayuda, y ser capaces de darles el auxilio que se debe a los necesitados". La alcaldesa también le pidió a la Virgen por Reig Plà y un año más volvió a reclamar a la Patrona "el fin del terror. Mañana Cartagena se unirá en un abrazo a las víctimas del terrorismo, pero hoy, Señora, venimos a pedirte por el éxito de las alianzas que persiguen la paz y la justicia". Decenas de fieles, además de la Corporación Municipal y numerosas autoridades civiles y militares asistieron a la Onza de Oro.