A ti clamo, Señor Jesucristo



Vamos a acabar la semana laboral por la puerta grande, con música del grande, con el que acabamos la semana cada domingo. La música de Bach siempre nos sabe a poco y por eso creo que es bueno ir poniendo alguna música de él además de las cantatas, cosa que hago de vez en cuando... Hoy, vamos a escuchar una obra bellísima, como no podía ser menos.

Por tanto, vamos a escuchar hoy algo de la inconmensurable música de Johann Sebastian Bach (1685-1750), maestro alemán nacido en Eisenach. Ya te he hablado alguna vez de que Bach era un extraordinario organista. Pero también tocaba otros instrumentos, como el clave, el violín o la viola. Pero, si bien era capaz de tocar sus propias obras para teclado, y quizá ser el mejor intérprete de ellas, no era así tanto con las dedicadas a otros instrumentos. Por ejemplo, era un hábil y buen instrumentista de violín pero no tan extraordinario como de órgano. Compuso sus famosas "Seis Sonatas y Partitas para violín solo" pero es muy posible que no fuese de salvar todos los escollos que él mismo había puesto en la partitura (se dice que quizá fueron compuestas para Pisendel o para Joseph Speiss). A pesar de todo, como era norma en la época, Bach estaba muy formado en varios instrumentos, lo que le proporcionaba una independencia a la hora de componer y conocer la técnica de varios instrumentos.

De Bach vamos a disfrutar su preludio coral Ich ruf zu dir, Herr Jesu Christ BWV 639, una de sus obras más bellas para el órgano. El pedal presenta una estructura muy parecido al acompañamiento del bajo continuo. El tenor interpreta acordes de forma arpegiada en semicorcheas. Bach establece que se interprete la pieza a dos teclados y clave, creando una textura increíble. La melodía coral está presentada de una forma meditativa y lenta. Por cierto, que esa melodía ha sido usada por otros maestros a modo de homenaje a Bach dado que la pieza es una delicia. Espero que la disfrutes.

La interpretación es de Ton Koopman al órgano.

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