La Iglesia española también fue noticia en las décadas 70-80 del siglo pasado por el apartamiento ministerial de un tercio de los presbíteros existentes y de algunos obispos. El Espíritu sugirió que tamaña sangría no podía ser ignorada, y menos abandonada a su suerte. Por todo el mundo surgió un clima de apoyo a estos sacerdotes. Muchas comunidades protestaron a los dirigentes eclesiales: preferían que estuvieran casados a quedarse sin sacerdotes. Las autoridades de la Iglesia desoyeron los reclamos y optaron por la ley. Tras más de 46 años, siguen las asociaciones nacionales, muchas asociadas a nivel internacional, pidiendo la admisión de estos sacerdotes.

En España respondieron a este signo de los tiempos, creyéndolo inspiración del Espíritu divino,dos asociaciones, una de corte más tradicional o conservador (ASCE: Asociación de Sacerdotes Católicos Españoles), y otra de talante más abierto (MOCEOP: Movimiento Celibato Opcional). Surgieron para buscar una salida evangélica a los hermanos que deseaban ejercer el ministerio en matrimonio. Ambas siguen vivas.

ASCE está animada por el sacerdote casado, José María Lorenzo Amelibia. Jamás ha renunciado a su sacerdocio ministerial. De hecho lo ejerce de modo virtual, sobre todo en su Blog en RD, con meditaciones y comentarios de actualidad eclesial y ética: https://www.religiondigital.org/secularizados-misticayobispos/ Si quieres escribirme hazlo a: josemarilorenzo092@gmail.com; Puedes solicitar mi amistad: https://www.facebook.com/josemari.lorenzoamelibia. Mi cuenta en Twitter: @JosemariLoren

No hace mucho envió una carta al Papa pidiendo lo mismo que viene solicitando desde hace casi medio siglo. El Jueves Santo último (06.04.2023) enviaba “a todos los obispos del mundo” un comunicado “urgente y muy breve”, titulado “Jueves Santo: existimos los sacerdotes dipensados”:

          “Señores Obispos católicos: Hoy Jueves Santo: Urge que solicitéis al Papa que en las celebraciones de la Eucaristía, puedan concelebrar todos los sacerdotes dispensados. Es exigencia de la misma institución de la Eucaristía, de la institución del Mandamiento del Amor y de la Institución del Sacerdocio. Cuestión de fe. Recordar el canon 40 del Concilio de Trento, sesión IX. Un abrazo y unidos en la Eucaristía. José María Lorenzo Amelibia, sacerdote desde hace 65 años”. Creo que alude a este Canon tridentino: “Si alguno dijere que por la sagrada ordenación no se da el Espíritu Santo, y que por lo tanto en vano dicen los obispos: `Recibe el Espíritu Santo´; o que por ella no se imprime carácter; o que aquel que una vez fue sacerdote puede nuevamente convertirse en laico, sea Anatema” (Antiguo Denzinger, n. 964; nuevo Denzinger, n.1774). 

El Papa Francisco, en una entrevista reciente, al recordar que “el celibato en la Iglesia occidental es una prescripción temporal”, remarcaba que dicha prescripción “no es eterna como la ordenación sacerdotal, que es para siempre, te guste o no. Que dejes o no dejes es otro tema, pero es para siempre. En cambio el celibato es una disciplina” (Entrevista con Infobae, diario argentino on line, realizada por Daniel Hadad.10 Marzo 2023). Si “la ordenación sacerdotal es para siempre”, tiene razón José María. El concilio de Trento afirma rotundamente: “aquel que una vez fue sacerdote no puede nuevamente convertirse en laico”. El Jueves Santo recuerda la institución del sacerdocio ministerial. Todos los que han sido instituidos sacerdotes, debían ser llamados a celebrarlo, sean casados o célibes. Lo mismo ocurre con las bodas sacerdotales de plata y oro. Salvo excepciones, sólo invitan a célibes. Como si el celibato fuera el sacerdocio ministerial. Es una manifestación más de clericalismo. Una forma más de marginación de quienes en conciencia decidieron ejercer un derecho humano, antes que obedecer una ley que no pudieron soportar humanamente.

El 23de abril pasado, Moceop hizo pública la Carta, fechada el 10 de Abril de 2023, al Papa Francisco (RD 23.04.2023). El Papa conoce bien la “Federación Latinoamericana de Sacerdotes Casados”,fundada por Jerónimo Podestá, obispo argentino y su esposa Clelia Luro, integrada, como Moceop, en el Movimiento Internacional de Sacerdotes católicos casados. Ambos estuvieron en Madrid, en casa de Andrés y Tere, coordinadores del Moceop. Juan Cejudo, miembro destacado de Moceop, escribe sobre Jerónimo y Clelia: “Juntos estuvieron también en mi casa en Cádiz en una ocasión, donde comieron y pernoctaron y pudimos conversar en un clima relajado, lejos de los encuentros y reuniones más formales en las que coincidimos. Con ellos también tuvimos una reunión en el campo, en Puerto Real (Cádiz), donde asistieron muchas personas y donde juntos celebramos la eucaristía. Quienes le conocieron lo recuerdan con admiración y cariño. Jerónimo era la bondad, la dulzura, la ponderación en las formas, aunque siempre profundo en el fondo. Clelia era la fuerza, el empuje que Jerónimo necesitaba. Los dos formaban una pareja sacerdotal excepcional, que dieron sus vidas a las causas sociales serias y a la transformación evangélica de la Iglesia” (RD 08.08.2016. Aniversario del nacimiento de Jerónimo Podestá -8 de Agosto de 1920-).

A pocos días de ser elegido el Papa Francisco, “Ámbito Financiero”, diario argentino, entrevista a Clelia Luro, viuda del obispo Podestá (fallecido el 23 junio de 2000). 

“¿Que nos puede decir del Papa Francisco I?

- Jerónimo un mes antes de morir me dijo: `voy a ir a hablar con el cardenal´. Y yo le dije: `¿para que vas a ir si Quarracino no te quiso recibir?´. El me respondió: `Pero, este no es Quarracino, es un jesuita muy inteligente y me va a escuchar´. Y fue, y estuvo como dos horas. Jerónimo volvió muy contento. Me dijo: `es un hombre muy inteligente, muy abierto, tenés que cuidarlo´.

- La iglesia no se acercó a Jerónimo ni siquiera los curas del Tercer Mundo que se apartaron bastante de Jerónimo. En cambio, Bergoglio cuando supo que estaba internado me llamó por teléfono y me preguntó si podía llamarlo. Le contesté: `Cómo no, va a estar contento´. Entonces le dije que estaba en el sanatorio San Camilo y estuvo conversando con él.

- Cuando lo llevaron a terapia (cuidados intensivos), Bergoglio estaba en una audiencia y la monja le avisó que estaba en terapia. Bergoglio largó la audiencia y fue al San Camilo. Bergoglio le dijo a Jerónimo: `Acá te traigo la unción para que te levantes´. Jerónimo ya estaba en coma. `¿Habló algo?´, le pregunté: `No, Clelia, me apretó fuerte la mano´, me respondió. Sé lo que ha significado para Jerónimo cuando estaba partiendo que se haya acercado Bergoglio a él. Después le dijo a las monjas: `No la saquen a Clelia de terapia, déjenla hasta el final´. Es que a mí me dejaban estar 15 minutos nada más. Bergoglio me dijo: `no se aparte de Jerónimo hasta que parta´, y me pude quedar con él tres días.

- De ahí nació también en mí el agradecimiento, el cariño que le tengo a Bergoglio. Mas que todo, él es un hombre de gestos, y uno cree por los gestos; con las palabras uno puede decir cosas lindas; la cosa es lo que haces. Bergoglio es un hombre de gestos y, también de palabra pero se manifiesta lo que él es por los gestos”.

“¿Cómo lo ha visto en estos primeros días?

- Ya se está manifestando con varias de sus actitudes en el Vaticano. Aún todavía no ha hablado de los problemas que existen, que son muchos y muy difíciles. El no tenía intención ni quería ser Papa, él había renunciado ya por la edad a la Curia, pero Benedicto XVI no le había aceptado la renuncia. Cuando se despido de mí el domingo, porque el viajó el lunes, yo le dije: "Ya no volvés" y él me respondió: "sos una bruja mala". Le contesté: "No, te aseguro que no sé lo que siento, pero te vas a quedar allá, la vez pasada te negaste pero esta vez no vas a poder negarte". Me respondió: "Y, ya lo sé Clelia". Cuando yo empecé a ver el humo negro dije "acá no se ponen de acuerdo y va a salir Bergoglio, así fue y ahí está”.

“Un cardenal primado recibe y habla con un obispo casado y su mujer, ¿estamos ante una Iglesia en revolución?”

“Después que murió Jerónimo, durante 12 años, todos los domingos sin faltar Bergoglio me llamaba por teléfono y hablábamos como 40 minutos. Y él me decía mientras se reía: "Jerónimo te dejo para que me ayudes a pensar". Así lo fui conociendo y después luchando mucho con la prensa porque hubo una línea maldita que siempre quiso el enfrentamiento del Cardenal con la Iglesia o de los Kirchner con el Cardenal. Fue una cosa muy difícil de enfrentar porque la mayoría de las veces no fueron verdad. Yo me acordaba de Perón que le dijo a Jerónimo cuando pasó lo que pasó con la Iglesia, le dijo que fue culpa de la CIA. Yo veía una mano negra en ese afán de destrozar y enfrentar a la Iglesia con el Gobierno” (18 de marzo 2013. www.ambito.com/política/bergoglio-es-un-hombre-gestos-n3780190).