Un libro de Cesar Vidal difícil de recomendar (I).

No diré si han sido 19 € mal invertidos, porque no lo sé. Hay cosas muy buenas que he aprendido sobre la historia del pueblo judío, cosas en las que Cesar Vidal no tiene forma de manipular por lo que he visto. El problema es que cuando cruzas el umbral del siglo XIX observas como el autor procura atacar con mucha dureza a Carlos Marx (que no es santo de mi devoción) y a Sigmund Freud (por el cual no siento tampoco simpatías).
Creo que muchos filósofos contemporáneos han reconocido el valor de la filosofía marxista. Es uno de los autores estudiados en bachillerato y en todas las facultades de filosofía. No soy la mejor persona para defenderlo dada mi animadversión hacia él. Si en vida fué un cerdo que olía muy mal no lo sé, eso lo sugiere Cesar Vidal y no he podido contrastarlo. Supongo que si oliera sería por las barbas, que las barbas largas requieren muchos cuidados para evitar ir dando malos olores. Aunque Cesar Vidal lo acusa en su libro de no bañarse y de oler por las axilas y de dejar embarazada a una criada de su amigo Hengels. También lo acusa de tener la costumbre de ir rompiendo farolas por Londres, google solo menciona como única referencia sobre esto que desde la “COPE” alguien lo acuso de apedrear farolas, y sabiendo quien trabaja allí no es de extrañar que se trate del propio Cesar Vidal.
Pero sobre Marx hay algo que no entiendo bien. Las omisiones de Cesar Vidal son intencionadas. Tilda a Carlos Marx de ser antisemita, se basa en un libro suyo: “La cuestión Judía”. Por lo que se dice en Internet, Marx escribió algo antisemita en el libro, digamos que Marx justificó que los judíos eran más conocidos como banqueros por una cuestión de codicia. Pero la omisión fundamental de Cesar Vidal es que no menciona los orígenes judíos de Carlos Marx. Cosa como digo, insólita. Si lo hace es porque en toda su obra desea identificar a los nazis con la izquierda política exculpando a la derecha. De eso ya lo hablaremos más adelante.
Luego tenemos el caso de Freud. Cesar Vidal lo califica de farsante y estafador con el psicoanálisis. También lo acusa de no haber curado jamás a nadie, a mi esto me parece insólito, porque hasta un estafador es capaz de cómo mínimo curar a alguien. Reconozco que Freud tiene ideas muy controvertidas, en las que Cesar Vidal no entra a criticar. Cesar Vidal comete por ejemplo una contradicción, critica duramente a Freud por su obsesión con el llamado complejo de Edipo, pero unas páginas después, el propio Cesar Vidal se contradice arguyendo como origen de la homosexualidad el propio complejo de Edipo sostenido por Freud. Además añade que aquellos matrimonios con mujeres dominantes o padre ausente o insignificante dan lugar a hijos homosexuales, como no, resulta que Cesar Vidal tiene ideas al más puro estilo Freud.