Fútbol y globalización

El Mundial de fútbol de 2006 inoculó un virus a nivel planetario. Cada cuatro años, el mismo acontecimiento se convierte en un fenómeno mundial. Cuando sólo 3.200.000 de afortunados podrán estar en las gradas de los escenarios, nada más salir de la imprenta las entradas a los mundiales se registraron 36 millones de peticiones para ver in situ el evento. Más de 4.000 millones de espectadores, el 70% de la población mundial estuvo, en un momento u otro, clavada ante las pantallas de la televisión. Mientras se jugaban los partidos, las naciones en liza se paralizaban. Hasta hoy, la globalización en ningún momento ha sido tan real como en los momentos de un mundial de fútbol
Volver arriba