La Iglesia diocesana de Salamanca quiere expresar su solidaridad y cercanía a las comunidades de las comarcas de Vitigudino y Ledesma José Luis Retana celebrará en la ermita de Villaseco de los Reyes una misa por los afectados del incendio de Cipérez

La celebración tendrá lugar el domingo, 31 de agosto, a las 12:30 horas, en este templo mariano, punto de referencia espiritual de la comarca
Las comunidades del arciprestazgo de Vitigudino-Ledesma-Robliza han sido convocadas para dar gracias a Dios, reconocer la entrega de quienes combatieron el fuego y pedir fortaleza en el camino de la recuperación
(Diócesis de Salamanca).- La Iglesia diocesana de Salamanca quiere expresar su solidaridad y cercanía a las comunidades afectadas por el grave incendio que ha asolado más de 10.500 hectáreas en las comarcas de Vitigudino y Ledesma. Por ello, el obispo de Salamanca, Mons. José Luis Retana, celebrará el domingo, 31 de agosto, a las 12:30 horas, una eucaristía en la ermita de Nuestra Señora de los Reyes, en Villaseco de los Reyes.
El incendio, que se inició el 13 de agosto en la localidad de San Cristóbal de Mochuelos en el término municipal de Cipérez, se ha convertido en el mayor registrado en la historia de la provincia. El fuego, que llegó a recorrer unos 25 kilómetros en línea recta, arrasó robledales, prados y monte bajo, alcanzado varias casas y naves, y dejado varios heridos. Los vecinos de Gejo de los Reyes y Villaseco de los Reyes tuvieron que ser desalojados y fueron acogidos en Ledesma. También se vieron afectados los términos de Cerezal de Puertas, Villar de Peralonso, Espadaña, El Groo y sus pedanías.
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Una oración común bajo el manto de la Virgen
La ermita de Villaseco, donde se venera a Nuestra Señora de los Reyes, es un lugar de encuentro espiritual para los pueblos del Arciprestazgo de Vitigudino-Ledesma-Robliza, y por este motivo ha sido elegida para esta eucaristía. La celebración del 31 de agosto quiere ser un signo de unidad y de consuelo: un abrazo de toda la Iglesia diocesana a estas comunidades heridas, en la que se dará gracias a Dios por la ausencia de víctimas mortales, se reconocerá la entrega de quienes han trabajado en las labores de extinción y en la ayuda a los damnificados, y se pedirá por los heridos y por quienes han perdido sus bienes. Bajo la intercesión de la Virgen, también se elevará una oración para el Señor acompañe a estas comunidades en su camino de recuperación.

En una carta remitida la semana pasada, Mons. José Luis Retana ya transmitía a los fieles su oración y cercanía: «Compartimos vuestra inquietud, incertidumbre y dolor, y rezamos por vosotros». También agradecía los gestos de solidaridad vividos durante los días del incendio: «Es grande el corazón de las gentes de nuestra tierra», y reconocía el compromiso de bomberos, cuerpos de seguridad, protección civil, sanitarios, UME y voluntarios, a quienes enviaba su gratitud y oración. Finalmente invitaba a mirar este momento como una llamada a la conversión y al cuidado de la creación: «Supliquemos al Señor que cese este drama, que nos enseñe a cuidar juntos nuestra casa común».
Celebración en Cipérez
Junto a esta cita diocesana en Villaseco de los Reyes, la parroquia de Cipérez celebrará este viernes, 22 de agosto,a las 12:00 horas, una misa en honor a San Sebastián, patrono del municipio, que concluirá con una procesión por las calles del pueblo. La comunidad quiere expresar su agradecimiento por la protección recibida y por la entrega de cuantos han colaborado en las labores de extinción, así como de apoyo y esperanza para quienes han sufrido sus consecuencias.
En este término municipal, donde se originó el incendio, el fuego arrasó más de 7.000 hectáreas y mantuvo en tensión a los vecinos. Aunque no llegó a penetrar en el casco urbano, la preocupación fue grande por las consecuencias que habría supuesto que las llamas alcanzaran la fábrica de obleas, que cuenta con un depósito de gas propano. Finalmente, el fuego se detuvo a tan solo 50 metros.
