De Aniversarios y "aniversarios".

Mal verano parece ser éste, al recuerdo de siglos pasados. ¿Por qué los hechos aciagos se recuerdan más que los venturosos? Hoy nos retrotraemos a centurias atrás. 

Este año por algunos aspectos aciago, es un año de celebraciones y recuerdos, o más que recuerdos. Cuando son dos ceros los añadidos a un número, parece que su celebración es de obligado cumplimiento, más si están tan cerca de nosotros como los que traigo a colación. Cito alguno de ellos:

  1. Nacimiento de Alfonso X el Sabio. La figura de este rey tiene para mí connotaciones afectivas. Durante casi treinta años he “paseado” sus Cantigas por toda España, Nueva York, Dinamarca, París, Italia... siendo el último lugar el Museo Visigótico de Toledo, con versiones muy aceptables, por aceptadas. “Nacerá” en Toledo, en noviembre, hace 800 años. Pero además pasará su infancia, quizá sus diez primeros años, en unos pueblitos que suelo recorrer en bicicleta en estos días de verano: Villaldemiro y Celada del Camino (Burgos, vía hacia Palencia), antes de afincarse en Galicia. ¡Y pensar que estos montecillos, esta rivera del Arlanzón, estas tierras llanas... fueron horizonte vital de tan magno rey!
  2. Hace también 800 años, 20 de julio del capicúa 1221, el obispo Mauricio puso la primera piedra de la Catedral de Burgos. Reinaba entonces el que luego declararían santo –bien sé por qué—Fernando III, padre del citado anteriormente. ¿Qué se puede decir de esta catedral? ¡Que vengan a verla los que no la hayan visto! Cuando yo “celebraba” estas cosas del rito, muchos domingos asistía a la misa de doce en la catedral (¿para qué ir a San Gil si tenía al lado tan soberbia mansión?). Sí, vivan en Cádiz, en Murcia o en Sitges, sólo la visita de la Catedral merece la pena el viaje. Ya luego pueden ir a la Cartuja o a las Huelgas (el miércoles, visita gratuita).
  3. Y de Burgos, a Palencia y su catedral. Total, son unos 80 o 90 km. Se la llama “la bella desconocida” y este año “la bella reconocida”. Por fuera no parece gran cosa, pero ¡por dentro...! Y si parece gran cosa, porque es la 3ª más grande es España. Es su catedral. Cumple este año su 700º aniversario (a lo cursi, diría su septingentésimo aniversario).
  4. No me olvido de que estamos por los 500 años de otro hecho histórico, del que el resto del mundo no quiere hacer mención. Yo, con Santiago Albo, lo sigo día a día: Juan Sebastián Elcano, que no Magallanes ni inglés alguno, dio por vez primera la Vuelta al Mundo. Dentro de pocos días, junio-julio de 1521, la expedición, ya mermada por la muerte de Magallanes y la masacre de Cebú, llegará a Borneo para dirigirse luego a las Molucas (islas de Ternate, Tidore, Mare, Motil Maquián...) Tendremos que esperar hasta septiembre de 1522 para celebrarlo en Sanlúcar y Sevilla. El que quiera saber más, que lea libros, sobre todo el del fementido italiano Antonio Pigafetta, tripulante de la "Trinidad". Apasionante aventura.
  5. Y ahora pasamos al Centenario de algo. Sí, fue “algo” que yo considero el inicio de “todo” nuestro presente: supuso el triunfo de una dictadura (Primo de Rivera); la caída de Alfonso XIII; el proyecto de República, casi muerta a poco de nacer; la Guerra Civil, cuyos protagonistas se fajaron en tales desastres... Hace ahora 100 años –julio y agosto de 1921—El Jatabi, o sea, Abd-el-Krim, propinó a España uno de sus mayores desastres: el de Annual y al medio mes el de Monte Arruit. ¡Qué poco se sabe de aquello por el interés que hubo en ocultarlo todo! Sugiero la lectura de una novela de Ramón J. Sender, “Imán” cuyo protagonista siguió los mismos pasos que un conocido por mí en Puentearenas hace dos veranos, muerto a primeros de agosto en la enfermería de Monte Arruit. Me impresionó ver la casa de sus padres, un comercio de ultramarinos hoy bar; estar con su sobrina; leer su “carta”... es decir, vivir de cerca un drama tan lejano. 
  6. Y llego al final que hubiera querido ser el principio: el genocidio cátaro cometido en estas fechas, pero hace también 700 años, por la Iglesia –papa Inocencio III, Santo Domingo de Guzmán y San Bernardo, creo— con el Estado –Felipe II de Francia--. En 1321, 24 de octubre, fue achicharrado Ghilhem Bélibaste, último “perfecto” del catarismo occitano. Como no hay tiempo para más, lean el libro de Jesús Ávila Granados “El holocausto cátaro”, Ed. Nazarí. Total, son sólo 24 € de nada. En proporción, fueron asesinadas más personas que en los genocidios armenio, argelino o hutu. Epicentro, la ciudad de Beziers.

NO SÉ SI PODRÉ SEGUIR ESCRIBIENDO AQUÍ. DURANTE UN TIEMPO “DESAPAREZCO”. ESPERO VERNOS AL REGRESO DEL VERANO. O QUIZÁ ANTES. Es lo que tiene ocultarse en un pueblo de apenas 40 habitantes.

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