Creer o no creer en Dios (2/3) ARTICULO TRES MIL.

Partimos de que son posturas irreconciliables. El creyente, sin insultar ni vejar, se dirige al no creyente y le dice: "Cree en Dios que Él te procurará confianza y fuerza para solucionar todos tus problemas". El no creyente le contesta: "No me hace falta creer en Dios porque no soluciona nada y tengo que ser yo el que, buscando, encuentre soluciones a los problemas de la vida". Y aquí no sirven razonamientos: o se cree en Dios o se cree en el hombre. O bien: se trata de creer en un Dios personal frente a creer en un dios idea. Todo es cuestión de elección.

Como nota al margen, curiosamente no es ese Dios personal sino este Dios idea el que ha generado esa infinidad de obras de arte, catedrales, escritos... El dios personal da confianza al creyente, que no necesita de tanta parafernalia para acceder a él.

ARTÍCULO DE Máximo Alvarez Rodríguez | Fuente: Catholic.net

Aunque para algunos Dios les resulte indiferente, ellos no son indiferentes para Dios.
--Presupone el articulista que ese Dios amoroso y personal existe. Petición de principio que no acepta la persona que ha pensado en otras hipótesis respecto a la idea "Dios".

Si se hiciera una encuesta nos encontraríamos con que hay mucha gente que cree en Dios, pero también con otros que dicen no creer o que "pasan". No vamos a decir que unos sean mejores y otros peores, porque puede haber creyentes cuya vida deje bastante que desear y no creyentes que son excelentes personas. Pero eso no quiere decir que resulte indiferente la existencia o no-existencia de Dios.
--Se han hecho miles de encuestas... Mezcolanza de ideas entre existencia y "mejores y peores". Es rotundamente falso que dependa de creer en Dios el ser o no buena persona. Falso.

Desde niño tuve la suerte de considerar a Dios como un ser cercano, como alguien de la familia, como alguien real; algo tan normal como tener padres o hermanos o amigos. Y esa experiencia de Dios es siempre muy gratificante. Te inspira confianza, seguridad, te da ánimo. Aunque eso no significa que desaparezcan los problemas o las pruebas en la vida. Por eso me da mucha pena cuando me encuentro con gente sin fe. Es mucho lo que pierden. Porque en el fondo vivir sin fe equivale también a vivir sin esperanza. Si Dios no existe se supone que tampoco habrá vida más allá de la muerte, que la vida no tiene sentido.
--"Desde niño..." Un psicoanalista le diría que ha personificado vivencias familiares: ha proyectado el ideal paterno-materno en otro ser ¡Y claro que eso es gratificante!. ¿Pena por los que no creen en la existencia de ese ser pater/maternalista? Pena la que siente el que piensa en los crédulos perdiendo el tiempo y las energías en oraciones, ritos, plegarias, jaculatorias, rosarios... esperando que eso solucionará todo. Habla de esperanza y sentido creyendo en Dios: otra petición de principio. Precisamente son quienes encuentran sentido en esta vida los que más gozan de la vida, porque es corta, y los que más interés tienen en que todo esto cambie a mejor, trabajando por ello. Los "oracionistas" alienan en Dios el solucionario de la vida.

Entiendo que cualquier ser humano pueda tener dudas sobre Dios o que diga que no entiende nada. Pero de ahí a negar su existencia hay un abismo. ¿No parece demasiado atrevimiento que un hombre afirme categóricamente que Dios no existe? Concedamos que pueda decir que no encuentra pruebas para demostrar su existencia, pero tampoco de su no-existencia.
--Incongruencias: "Entiendo las dudas..." ¿Y no entiende que esas dudas pueden llevar a pensar en dios como producto humano? No se trata de entender, se trataría de aceptar que haya personas que piensan de otro modo. Siempre lo mismo respecto a pruebas de "inexistencia": ¡es quien afirma el que debe dar pruebas...! pero pruebas convincentes, no citas y citas ni referencias a vivencias personales, tan subjetivas ellas.

Nadie nace ateo ni agnóstico. Incluso los ateos más destacados han sido en alguna etapa de su vida creyentes. ¿Puede depender la existencia de Dios de su cambio de ideas? ¿o de su estado de ánimo? Si Dios existe no depende de que yo crea o deje de creer. Yo no puedo inventarlo ni destruirlo.
--De nuevo peticiones de principio, presupuestos, prejuicios y premisas. ¿Está demostrado que haya genes que predisponen a creer? ¿Y qué quiere dar a entender con eso de "ateos que han sido creyentes"? ¡Pues claro! Pero pensaron por su cuenta y dedujeron. Al menos afirma algo que negó antes: "Dios no depende, o no debería depender, de creer o no creer".

Pero tampoco puedo pretender ser más que Él, ni pedirle cuentas, ni querer abarcar sus planes. Hay quien deja de creer porque las cosas no le salen como él quisiera, porque no nos concede todo lo que le pedimos o porque se hace presente el sufrimiento. Si Dios atendiera todos nuestros caprichos o deseos, si nada en la vida nos hiciera sufrir, poco mérito tendría creer en Él; nos quitaría la oportunidad de demostrarle que lo queremos de verdad. Supongamos que alguien nos da un millón de pesetas y nosotros en consecuencia le manifestamos nuestro agradecimiento. Eso no tendría ningún mérito. Pero si nosotros entregáramos parte de nuestros bienes a alguien que no nos va a dar nada a cambio, eso sí sería meritorio.
--No, uno no deja de creer por eso, aunque también sucede. Generalmente se deja de creer por dejar de practicar, pero lo más normal es "dar de lado" esas creencias "anormales" porque se piensa y profundiza en ellas. Las comparaciones que aporta no tienen sentido en este caso.

Me duele pensar que haya gente pasa de Dios, pero tampoco es mérito de uno el creer, por eso deseo vivamente que todos tengan esa suerte, que Dios les dé ese don y que les ayude a abrirse a él. En todo caso, sepan que aunque para ellos Dios les resulte indiferente, ellos no son indiferentes para Dios.
--Esto es sublime: ¿depende de Dios el que uno crea o no? ¡Pues apaga y vámonos! Termina con la misma petición de principio, de que Dios es. Para tal viaje no hacían falta las alforjas verbales de un artículo con muchos pies y poca cabeza.
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