Ni San Sebastián es un erial espiritual ni Munilla será su salvador

No suelo contestar a los comentarios. Los considero siempre expresión de libertad del que los escribe y una preciosa herramienta de "feedback" para el periodista, al que, antes, nadie tenía acceso ni podía criticar lo más mínimo. Aunque tamibén es cierto que algunos, escondidos en el anonimato, realmente se pasan y, en vez de criticar o aportar, sólo insultan. Con lo cual quedan retratatos. No es el caso de Giano, cuyos comentarios aportan un punto de vista perfectamente defendible.
Si traigo hoy a colación el comentario de Giano es porque refleja la postura de los sectores eclesiásticos más conservadores. En el fondo, se trata de justificar el nombramiento de Munilla declarando a la diócesis de San Sebastián "zona espiritualmente catastrófica". Un erial, vaya. Sin frutos. Estéril.
¿Se puede predicar algo así de una diócesis como la de San Sebastián?
Según los últimos datos hechos públicos, la población del territorio de la diócesis de San Sebastián es de 694.944 habitantes. Su extensión es de 1.977 kilómetros cuadrados. El número de parroquias es de 221 y el número de sacerdotes diocesanos incardinados asciende a 317, de ellos 279 en la diócesis, 13 en otras diócesis españoles y 20 en misiones. Ni en 2007 ni en 2008 hubo ninguna ordenación sacerdotal. En este curso ha habido cinco seminaristas mayores.
En la diócesis hay también 239 religiosos con cargo pastoral. Hay asimismo un monasterio contemplativo masculino y 26 femeninos. El número de religiosos profesos no sacerdotes es de 190 y el de religiosas, 1.707.
En 2007 hubo 4.655 bautismos, 4.14148 primeras comuniones, 489 confirmaciones, 1.485 matrimonios. Para Obras Misionales Pontificas se recaudaron 508.100,56 euros; para Manos Unidas, 2.610.260,27 euros; y Cáritas, 5.319.163,81 euros invirtió en recursos sociocaritativos.
Hay 35 centros de caridad y sociales, en los que fueron asistidas en 2007 13.968 personas. El número de asociaciones laicales es de 84.
Por lo tanto, de erial nada. Una diócesis viva, muy comprometida con los pobres, encarnada y con sacerdotes muy preparados y muy cercanos a sus fieles. Eso sí, una diócesis que sufre las envestidas de la secularización. Quizás más que algunas otras, por su proximidad a Francia.
¿Qué hay pocos seminaristas? Como en otras muchas diócesis españolas, excepto Madrid y Toledo a las que afluyen las vocaciones procedentes de los movimientos. ¿Es que tiene más, por ejemplo, Tarazona y Huesca y Jaca, dos diócesis con prelados conservadores? Pues sí. Tienen una decena cada una, pero todos ellos procedentes de Latinoamérica. Pero autóctonos, nada de nada. Es otra solución: importar curas.
La idea de revitalizar el seminario se esgrimió ya cuando, hace años, se nombró a Ricardo Blázquez para Bilbao. Han pasado los años y el bueno de Don Ricardo no ha conseguido reflotar el seminario. Y a Blázquez no se le puede tachar de nacionalista o de progresista o de falto de espiritualidad.
¿Conseguirá Munilla más vocaciones? En Palencia tampoco es que consiguiese llenar el seminario. Eso sí, sacó a los seminaristas de la "roja" Pontificia de Salamanca, para llevarlos a la "segura" San Dámaso de Madrid.
Pero seguro que sí, que conseguirá unas cuantas vocaciones más que Uriarte. Pero siempre y exclusivamente de su propio caladero: los chicos de la asociación Loyola, algunos de los cuales ya los tiene formándose...en Toledo. No se fiaba del seminario se San Sebastián. Pero eso no significa que Uriarte o Blázquez o Asurmendi tengan sus diócesis respectivas convertidas en eriales.
Las razones, pues, del nombramiento de Munilla son otras. Y Tanto Giano como los eclesiásticos que comparten su tesis lo saben. Aunque con ello traten de justificar lo injustificable. Porque, a mí juicio y dejando siempre entrar, salir o quedarse (cada cual es libre en la viña del Señor), el nombramiento de Munilla no tiene perdón de Dios. El tiempo lo dirá. Pero entonces ya será tarde para pedirles cuentas a los muñidores de la operación, ¿verdad Giano?.
José Manuel Vidal