Un obispo que alaba la película "Natividad"

Ni la directora de "Natividad" Catherine Hardwicke, ni su guionista Mike Rich han pretendido realizar un film polémico o sorprendernos con inovaciones exegéticas. Se han limitado a traducir en imágenes la narración evangélica del nacimiento de Jesús. Así dejan que nos llegue intacta la absoluta sorpresa del misterio de Navidad, sin distraernos con cuestiones añadidas.
No es fácil para nosotros, que desde siempre hemos leído, meditado, asumido, celebrado y hecho objeto de oración la historia del nacimiento de Jesús, aceptar una determinada figuración. Un amigo me advertía al llegar al cine: "quizá no te gustará como les ha pasado a algunos, la figura de María...". Debo decir que no fue así: me fue resultando más y más entrañable a medida que avanzaba la proyección. Eso sí: te hace sentir la dureza de los cantos que la costumbre redondea demasiado . Impresiona, por ejemplo la dureza de la soledad de maría a la hora de explicar los primeros signos de preñez. El guión pone en los labios de su madre un deje de ironía amarga: "O sea...que te lo ha dicho un ángel..."Tampoco ahorra , el guionista, una alusión al riesgo de lapidación.
La imagen de José también resulta bastante lograda. Más bien distante a la hora del compromiso matrimonial -que establece sólo con los padres de ella- , duro en el momento de la sospecha, cuando le es revelado el misterio se vuelve otro: cariñoso, delicado, totalmente identificado con su mujer y con el designio divino. Hablando de figuras quiero subrayar también el clima de profunda y exultante alegría que rodea la escena de la visitación de María a Isabel.
El escenario de los hechos es áspero, primario, socialmente desgajado. Corrige posibles visiones suavizadas por la distancia . Así como nuestros belenes, nuestros Pastorets...tienden a incorporar nuestras formas actuales de vida -paisajes, lenguaje, costumbres- en el contexto bíblico, "Natividad" nos transporta a un mundo absolutamente distitnto al nuestro. Permitidme el atrevimiento de pensar que a San Francisco de Asís este film le hubiese gustado.
Joan Carrera (obispo auxiliar de Barcelona)