Esta es la pregunta del Resucitado en este domingo.
Además, a ellos que eran incrédulos, y que veían fantasmas, donde estaba Él, les dice: “Mirad… tocad… palpad mis manos y mis pies.”
A Jesús, al Hijo de Dios y hermano nuestro, al verdadero Salvador del mundo, sólo le encontraremos de verdad si palpamos las heridas de la humanidad en las que Él se hace presente; y si somos capaces de responder a su pregunta: ¿Tenéis algo para comer?
Lo demás, ¡fantasmas y fantasías!
Recordemos que Jesús este Domingo nos saluda deseándonos la Paz: "Paz a vosotros"; pidiéndonos algo de comer -muchos hoy tienen hambre- y diciéndonos: "¿Por qué os alarmáis?, ¿por qué surgen dudas en vuestro interior?"
Que Jesús, nos dé su Espíritu para saberle reconocer presente en nuestra historia, especialmente en los que tienen hambre, en los que están heridos, en los preferidos del Reino.