Las calasancias celebran la canonización de su fundador, este domingo, en Roma "Faustino Míguez apostó por dar a la mujer el papel que le corresponde en la sociedad y la Iglesia"

(Jesús Bastante).- "Faustino Míguez apostó por dar a la mujer el papel que le corresponde en la sociedad y en la Iglesia, él les da la palabra que se les arrebató". La superiora general de las Hijas de la Divina Pastora (calasancias), Sacramento Calderón, presentó esta mañana los actos de la canonización de su fundador, el escolapio Faustino Míguez, quien subirá a los altares este domingo en Roma.

La ceremonia, presidida por el Papa Francisco, contará con la presencia del cardenal Osoro. En la misma, junto al escolapio, se canonizará a un total de 35 personas, entre ellas los mártires de Tlaxcala y 30 misioneros de Brasil.

Durante la presentación, la madre Calderón destacó "el gozo por la canonización de nuestro fundador", que coincide con el Año Jubilar de toda la familia escolapia. Fundada en 1885, las Hijas de la Divina Pastora están hoy presentes en una decena de países de cuatro continentes, y continúan haciendo suya la labor fundacional del padre Faustino: la educación, la promoción de la mujer y la protección de los más débiles.

En España, Nicaragua, Colombia, Argentina, Camerún, Guinea o India, 238 religiosas y 1.400 laicos regentan 31 colegios y 11 obras, entre residencias, casas de formación y casas hogar.

El milagro atribuido a la intercesión del padre Faustino, y que posibilita su canonización, tuvo una protagonista, que esta mañana se encontraba en Madrid. Verónica Stoberg, chilena, madre de cuatro hijos, que durante tres meses estuvo en coma y prácticamente descartada. Sin embargo, el rezo de sus familia, de todos los colegios y especialmente, de la madre Patricia Olivares, quien le puso en el pecho las reliquias del padre Faustino. Una "cadena de oración" que tuvo sus frutos.

"Yo las sentí en mi pecho en ese momento", declaró Verónica, quien recuerda que "iban a desconectarme, pero en ese momento subió el nivel de coagulación para poder operarme". "No le tengo miedo a la muerte, sé que no es mala, que es algo bueno", subrayó la 'milagrada'. ¿Quién es el padre Míguez para ella? "Es un amigo, un ejemplo de vida. Yo soy mujer, tengo hijas, él fue importantísimo para la mujer", destacó.

Para la madre Sacramento Calderón, "la del domingo es una canonización de alguien que no nació santo, que se fue haciendo santo, en lo cotidiano y desde lo cotidiano". Se trató de "un mover movido por el amor, con una fe inquebrantable y una confianza sin límites", como sugiere una de sus frases más conocidas. "Dejemos obrar a Dios, que para mejor será".

"Faustino entendió que, a más amor y más fe, más compromiso, y por eso abrazó la causa de Dios, que es la de los pequeños, el bien del ser humano. Se comprometió en la lucha por un mundo mejor", destacó la superiora de las calasancias, quien lo comparó con el Buen Samaritano.

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