Bach-Kurtág, coral BWV 687
¡Feliz domingo! Si la música de Bach parece inagotable, las transcripciones de la misma también lo parecen. Siempre nos aportan algún aspecto nuevo, que está en la obra original, pero que lo mismo pasa desapercibido para nuestros oídos.
La música de hoy es de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach. En los periódicos de Leipzig, Berlín y casi todos los lugares aparecieron breves como este: «Leipzig, 31 de julio. El último martes, es decir, el 28 del corrientoe, el famoso señor Joh. Seb. Bach, compositor de la corte real polaca y de la del príncipe de Saxe-Weissen y de Anhalt-Cöthen, director de Chori Musici y cantor de la Escuela de Santo Tomás de aquí, a la edad de 66 años, después de las infructuosas consecuencias de una operación de los ojos a cargo del un reconocido inglés. La pérdida de este hombre de una habilidad poco común es muy llorada por todos los connoisseurs de la música». No se sabe quién la escribió, pero sí que entendía que la primera habilidad de Bach era como musicus, es decir, un artista de reconocida profundidad y conocimiento hasta el fin de sus días.
Escuchemos su coral Aus tiefer Not schrei ich zu dir, BWV 687. Es una obra muy delicada que recibe su inspiración de un salmo propio del oficio de difuntos. Bach se hace eco de la debilidad de la humanidad, que dirige su mirada al trono de Dios, pero sin esperar nada a cambio. La melodía va evolucionando desde principio a fin mediante valores largos y pausados, de forma que Bach crea un ambiente delicado y a la vez algo opresivo (solo es una forma de hablar). De este conocido coral vamos a escuchar la versión para piano a cuatro manos del también compositor, el húngaro György Kurtág (1929).
La interpretación es de Lucas y Arthur Jussen al piano.