La Conferencia episcopal presenta la 3ª edición del Misal Romano en castellano Osoro: "Un libro para dotar de mayor esplendor y belleza a las celebraciones de la eucaristía"

(José Manuel Vidal).- "Es uno de los libros litúrgicos más importantes de la celebración en la Iglesia". Así define el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, la 3ª edición del Misal Romano, que se presentó esta mañana en la sede del episcopado. Una joya editorial que, a partir del próximo mes de marzo, será de uso obligatorio para todos los sacerdotes españoles y que cuesta 82 euros iva incluido.

Se trata del libro litúrgico indispensable para la celebración de la eucaristía, con todas las oraciones y rúbricas que el sacerdote pronuncia, los ritos que se llevan a cabo, los intervinientes y hasta las partes cantadas.

Esta nueva edición incorpora "abundantes cambios de expresión, retoques y precisiones", como explicaba el director de la editorial 'Libros litúrgico' de la CEE, Manuel Fanjul. También aseguraba que el libro es "digno en su aspecto exterior, para que mueva el pueblo a la reverencia".

El material de la cubierta es imitación piel en color rojo, que asegura su durabilidad y cuenta con un diseño de portada propio y nuevo, que luce una cruz antigua mozárabe, "que no asturiana", como precisó el asturiano Fanjul, en una de sus pinceladas de humor. A lo que contestaba en la misma clave monseñor Osoro, que fue arzobispo de Oviedo, que "la cruz no es la de Asturias, pero se intentó que sea parecida".

Son 1384 páginas en papel ahuesado, protegido por un estuche tipo petaca, una colección preciosa de láminas, un apéndice de 96 páginas para la celebración de la misa en latín y un estuche con un triple CD, que contiene la ilustración sonora de todos los textos musicalizados del Misal. Para que, como dijo Manuel Fanjul, los sacerdotes "canten la misa y no canten en la misa".

El texto del Misal, tal y como explicaba el director del Secretariado de la Comisión Episcopal de Liturgia, Luis García, "ha sido corregido por un profesor y miembro de número de la RAE con el fin de subsanar posibles errores o usos inapropiados del vocabulario o de la gramática castellana".

En cuanto a los contenidos, la única modificación esencial es la inclusión de la llamada fórmula "pro multis". Es decir, que en la celebración de la eucaristía, concretamente en la consagración del cáliz se cambia la frase "por todos los hombres" por la de "muchos".

Actualmente, la fórmula de la consagración del vino, que recita el sacerdote, es la siguiente: "Tomad y bebed todos de él, porque esta es mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna, que será derramada por vosotros y por todos los hombres para el perdón de los pecados". A partir de marzo, dirá que "será derramada por vosotros y por muchos". Con el cambio, se pretende una mayor fidelidad a los textos del Nuevo Testamento.

Otros pequeños cambios son la incorporación del nombre de San José en las plegarias eucarísticas o el cambio de denominación de la Virgen del Carmen, que pasará a denominarse Bienaventurada Virgen del Monte Carmelo.

La tercera edición del Misal Romano es la continuadora de las otras dos publicadas después del Concilio Vaticano II: en el año 1970 y en 1988. Y, según el presidente de la comisión episcopal de Liturgia, Julián López, obispo de León, "es el libro litúrgico más esperado de España".

En la obra han intervenido un gran número de especialistas y expertos tanto en liturgia como en edición, pero el obispo de León dedicó una mención especial al claretiano, Juan María Canals, durante muchos años director del secretariado de la comisión episcopal de liturgia y 'alma' del nuevo Misal Romano.

Con él, se intenta, según Carlos Osoro, "promover una mayor participación de los fieles en las celebraciones litúrgicas" y "dotar de mayor esplendor y belleza a las celebraciones de la eucaristía, porque "la Iglesia vive para la eucaristía".

Volver arriba