El episcopado más numeroso del mundo, la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB) tiene nuevo presidente. Se trata de Mons. Jaime Spengler, arzobispo de Porto Alegre, elegido como 14º presidente de la CNBB, que en el último cuatrienio ha ocupado el cargo de vicepresidente. La elección, en la que han votado más de 300 obispos, llevada a cabo en el 6º día de la 60ª Asamblea General de la CNBB, que se realiza en Aparecida de 19 a 28 de abril de 2023, se produjo en el tercer escrutinio con 210 votos, en el que se necesitaba mayoría simple.

Obispo franciscano

Nacido en Gaspar, en el estado de Santa Catarina, el 6 de septiembre de 1960, el nuevo presidente de la CNBB, que sucede a Mons Walmor Oliveira de Azevedo, arzobispo de Belo Horizonte, pertenece a la Orden de los Hermanos Menores (Franciscanos), en la que ingresó el 20 de enero de 1982. Hizo su profesión solemne el 8 de septiembre de 1985 y fue ordenado sacerdote el 17 de diciembre de 1990.

Tras doctorarse en Filosofía en la Pontificia Universidad Antonianum de 1995 a 1998, Mons. Jaime Spengler trabajó principalmente en el campo de la formación. Fue nombrado obispo auxiliar de Porto Alegre el 10 de noviembre de 2010 por el papa Benedicto XVI y ordenado obispo el 5 de febrero de 2011. Poco más de dos años después, el 18 de septiembre de 2013, el papa Francisco lo nombró arzobispo de Porto Alegre.

Un trabajo digno de lo que la Conferencia es en la historia de nuestro Brasil

El nuevo presidente, en un breve encuentro con periodistas, les agradeció su importantísimo papel en la evangelización. Mons. Jaime Spengler dijo acoger su nombramiento "con mucha humildad, con mucha sencillez, con temor y temblor, pero guiado por la fe". Con este espíritu dijo que se pondrá al servicio de la CNBB durante los próximos cuatro años, esperando poder hacer "un trabajo digno de lo que la Conferencia es en la historia de nuestro Brasil".

En cuanto a las perspectivas, el arzobispo Porto Alegre, vicepresidente en la actual administración, destacó que desea "continuidad a este proceso que estamos viviendo", en referencia a la sinodalidad, destacando la iniciativa primero del Celam y luego del Papa Francisco. El arzobispo de Porto Alegre se refirió al proceso de escucha, como algo que necesita avanzar, insistiendo en el espíritu de la sinodalidad, para que el espíritu de comunión y participación crezca y se consolide en la Iglesia.

Finalmente, Mons. Spengler pidió ayuda en el proceso sinodal para que el trabajo de evangelización pueda avanzar, para promover el Evangelio del Crucificado - Resucitado, destacando que "si queremos ayudar a transformar nuestras comunidades, el Evangelio es la referencia".