“La palabra “shalom” significa el estado esencial del ser humano, tal y como verdaderamente debe ser. Dios en el nacimiento de Jesús presenta de nuevo el ser humano tal como fue pensado por Dios” (Anselm Grüm).
Así que esta palabra encierra un significado que va mucho más allá de la ausencia de guerra. Es salvación, obra de Dios.
El ser humano que posee “shalom” es el ser que vive en armonía.
Cuando los pastores oyen el anuncio de esta paz a los hombres de buena voluntad entra en ellos esta armonía, esta alegría que les hace ir con diligencia al portal y allí encuentran todo tal como les había anunciado el ángel.
Encuentran al dador de la paz junto a José y María. Luego regresaran a sus rebaños dando gloria a Dios por lo que habían visto. Todos los que lo oían se quedaban admirados de lo que decían los pastores. Estos hombres de oficio humilde y despreciado fueron los privilegiados de
contemplar el gran don de Dios a los hombres: El Hijo de Dios hecho hombre para traer la paz y el bien a la humanidad.
Texto: Hna. María Nuria Gaza.