No derrumbarse, tener confianza

¿Qué hacer? ¿Quedarnos de brazos cruzados, desanimados como los apóstoles el sábado santo? No, Cristo ha resucitado pero pide nuestra colaboración. Él dijo a sus apóstoles, nos pide a cada uno de nosotros: “Id por el mundo y anunciad la Buena Nueva”. Tenemos que anunciar su resurrección con palabras y gestos. Hay tantas cosas que podemos hacer: Una sonrisa, ofrecer nuestro brazo a un anciano que camina con dificultad, una palabra de aliento al que lo está pasando mal,... hay muchas maneras de enjugar las lágrimas ajenas a nuestro alcance.
Tenemos un largo camino a recorrer y Jesús nos dijo que Él es camino. Recorramos por este camino iluminados por su luz que nos conducirá a su término a la Pascua eterna y no entraremos solos sino acompañados de aquellos a los que gratuitamente hayamos tendido nuestra mano. Texto: Hna. María Nuria Gaza.