#apóstoladelosapóstoles LAS MUJERES DISCÍPULAS, ANUNCIAN,TESTIMONIAN LA RESURRECCION DE JESUS

“Ellas salieron al instante del sepulcro con temor, pero con una alegría inmensa a la vez,y corriendo fueron a dar la noticia a los discípulos.En eso Jesús les salió al encuentro y les dijo: Paz a ustedes.Las mujeres se acercaron, se abrazaron a sus pies y lo adoraron.VAYAN A ANUNCIARLO...” Mat. 28,8-10

Cáñamo Rostro de Mujer Belleza Imagen para Pinterest

Vamos a partir de los Sinópticos, pequeños detalles con gran significación en el
caminar de las mujeres discípulas. Desde antes de la resurrección, las mujeres no se
quedaron encerradas ni inmóviles, estaban pendientes, en alerta, en medio de un
contexto difícil, como el de hoy... persecución del poder romano, amenaza, dominio de
poder político, exclusión de las mujeres, muerte...Sin embargo, este grupo de mujeres
discípulas, ante la muerte de Jesús, observemos lo que hacen:
Mac 15,47 “María Magdalena y María la de José, observaban dónde lo ponían”.
Mat 27,61 “Estaban allí María Magdalena y la otra María, sentadas frente al sepulcro”
Mac.15,40 Mt 27,55 “Había también mujeres mirando desde lejos” algunas autoras lo
interpretan, que venían de lejos, desde Galilea, como lo expresa Lucas
Luc.23,55 “Las mujeres que lo habían acompañado desde Galilea, fueron detrás para
ver el sepulcro y cómo colocaban el cuerpo”
Mat 28,1 “Pasado el sábado, al clarear el primer día de la semana, María Magdalena y
la otra María, fueron a ver el sepulcro”
“Cuando todavía estaba oscuro, María Magdalena fue a visitar el sepulcro” v1 Parece
que ella no fue sola, invitó a otras mujeres, según Marcos 16,1, nos dice que “fueron
María Magdalena, María, madre de Santiago y Salomé”.
En un contexto inmediato del juicio que hacen a Jesús, condena, crucifixión y muerte
de Jesús, de persecución a los seguidores de Jesús, este grupo de mujeres permanecen
presentes en medio del conflicto, vienen desde Galilea, fieles en el seguimiento,
arriesgadas, audaces, nadie las detiene, superan miedos, caminan hasta el lugar
clave, el sepulcro ....todavía oscuro, al amanecer...Quién nos correrá la piedra del
sepulcro?” “la piedra había sido echada a un lado, la piedra era muy grande” Mac
16,3-4. “De repente se produjo un gran temblor, el Ángel del Señor bajó del cielo, y
llegando al sepulcro, hizo rodar la piedra...” Mat 28,2 “Ellas salieron al instante del
sepulcro con temor, pero con una alegría inmensa a la vez, y corriendo fueron a dar la
noticia a los discípulos. En eso Jesús les salió al encuentro y les dijo: Paz a ustedes. Las
mujeres se acercaron, se abrazaron a sus pies y lo adoraron. () vayan a anunciarlo...”
Mat. 28,8-10. Estas mujeres no dudaron un minuto, lo reconocieron, creyeron en Jesús
y fueron a anunciarlo. Mujeres privilegiadas de creer en la Resurreciòn, el centro de

nuestro cristianismo, “El que cree en mí, así haya muerto, vivirá”, “Yo soy la
resurrección y la vida...”
Estas Mujeres arriesgadas, cómo nos interpelan Hoy?
Nos arriesgamos a ir a tantos Sepulcros de Hoy, Territorios de conflicto armado,
lugares de miseria, de dolor, de marginaciòn? Movernos de madrugada, a oscuras, a
acompañar, investigar causas, consecuencias, a construir Memoria...estas mujeres
observaban còmo colocaban el cuerpo. Còmo observamos hoy nuestra realidad? Con
qué criterios y enfoque? Seguimos de cerca el contexto, las Reformas perversas,
actuales del Gobierno? La violación a los DDHH? Las denuncias y reclamos del pueblo?
El reto es vencer la muerte por la vida, con proyectos alternativos, asociaciones
comunitarias, Redes sociales, articulaciones entre Organizaciones, defensa de los
derechos de las víctimas, derecho a la Verdad, a la Justicia, a la Reparaciòn integral y
exigencia de No Repetición..
Qué piedras deben removerse Hoy, para vencer la muerte y defender la vida? Cuàntas
piedras deben caer Hoy, para sacudirnos, desinstalarnos, entrar en contacto con los
que sufren?. Cuàntos lienzos nos atan, nos paralizan, nos meten miedo, nos mantienen
inmòviles? Dònde està nuestra creatividad para correr tantas piedras y no quedarnos
encerradas y encerrados? Hoy la pandemia es una guerra que nos aísla, nos encierra,
nos acalla y silencia...gracias a Dios, en este Paro Nacional, el pueblo superó el miedo y
salió a las calles a denunciar, a exigir derechos. Desde esta cuarentena, podemos
mover muchas PIEDRAS, ANUNCIAR, DENUNCIAR, PROTESTA, PROCLAMAR...
En un segundo momento nos detendremos en María Magdalena, Juan 20,1-18
Marìa Magdalena, VIO que la piedra de entrada estaba removida...se agachò y VIO los
lienzos en el suelo, “Lloraba y de nuevo se agachó y VIO a dos àngeles..”v 12. “Mirò
atràs y VIO a Jesùs de pie, pero no lo reconociò, lo confundiò con el jardinero” v14.
Sólo cuando Jesús la llamó por su nombre “María”, lo reconoció, “Maestro”.
“Fue Marìa Magdalena a anunciar a los discìpulos HE VISTO AL SEÑOR” Juan 20,18
El VER al Resucitado la lleva a predicar, a anunciar la Buena Nueva, el VER la conduce
hacia sus hermanos, el VER la convierte en signo de vida y de esperanza. y fue
anunciar al Resucitado, “He VISTO al Señor”.
En nuestra realidad de conflicto y violencia, vemos muchas mujeres comprometidas,
arriesgadas, como las del evangelio. Sandra Liliana, la Gobernadora indígena, que da la
vida por su pueblo, la asesinan para silenciarla!. En un Encuentro le preguntaron si no
le daba miedo! Y ella respondió: “Para qué es la vida? No es para entregarla! Mujeres
mártires de fe, como Hna Teresita Ramírez, Yolanda Cerón, Hildegard María y otras
más. Las Matriarcas de Trujillo, que me acompañaron a sacar de la tierra, a sus hijos,

esposos, hermanos, cuerpos torturados y destrozados. Las Madres de Soacha,
resistiendo en la búsqueda de sus hijos desaparecidos. Mujeres lideresas de
Organizaciones y Movimiento Social, que se exponen ante el señalamiento y la
amenaza.
Estas mujeres nos cuestionan: Cómo es nuestro VER en el contexto de hoy? Sólo
miramos, pero no Vemos! Què rupturas es preciso hacer, para poder VER AL
RESUCITADO y anunciarlo en medio de la muerte de Hoy?
El reto, es VER desde la realidad y la fe, con ojos críticos:
-Ojos de misericordia y compasión, que llevan a la solidaridad
-Ojos contemplativos que llaman a la acción liberadora y transformadora
-Ojos comprometidos que anuncian y denuncian, en actitud profética
-Ojos del Resucitado, que anuncian a un Jesús vivo en el contexto de Hoy
Fray Felicísimo Martínez nos dice “ “En nuestra fragmentada e insegura sociedad,
amenazada por la guerra y la pobreza, este testimonio profético requiere gran coraje y
competencia.(...) El Profeta es el que mira y ve de lejos, sin alejarse. Es el que lee la
historia desde más allá de la historia sin huir de la historia”, por eso se siente implicado
y comprometido con los procesos históricos.
La espiritualidad la descubrimos y la vivimos desde ese espacio doloroso, en la actual
situación de violencia que vivimos hoy en Colombia con grandes piedras, estrategias
muy sutiles, como las Reformas Tributaria, Pensional y de salud, casi incontrolables,
para imponer su poder de dominio. La consolidación del paramilitarismo que actúa
libremente bajo la tutela de fuerzas militares. Es el atropello y aniquilamiento de
Proyectos alternativos que buscan construir en la justicia nuevas formas de vida,
nuevas relaciones, pequeños modelos de sociedad, que desde su práctica cotidiana
comunitaria, Iglesia de los pobres, hacen vivo al Resucitado.
Es aquí donde debemos descubrir cómo se manifiesta el Resucitado, cómo nos habla,
“Pero esa noche no pescaron nada.Echen la red a la derecha y encontrarán pesca.
Echaron la red y se les hicieron pocas las fuerzas para recoger la red...cantidad de
peces” Jn 21,3-6. Jesús resucitado no se apareció en el gran templo de Jerusalén, ni en
la Sinagoga, sino en los lugares humildes y cotidianos, como en el lago, en el compartir
la mesa, en el camino de Emaús. Cómo se manifiesta Hoy el Resucitado en los
proyectos de lucha por una vida digna? Cómo es su forma de actuar, de interpelar, de
llamar, de comprometer? Si, el Resucitado está en nuestra vida, en las Marchas, en
nuestros Encuentros y fiestas, en las luchas sociales, es preciso VERLO!
El “desde dónde”, es el lugar ético y el lugar teológico para captar la significación y las
exigencias más hondas de nuestra fé. Es a partir de esta vivencia que iremos forjando
una espiritualidad desde la opción de un seguimiento radical del Resucitado, como lo
hicieron las mujeres del evangelio, con la convicción que la Resurrección de Jesús
“reafirma la experiencia de que la vida es siempre más fuerte que la muerte”.

Fue el testimonio de tantas Mujeres Mártires, que en su vida de evangelio, anunciaron
al Resucitado, encarnaron la fuerza de Dios, desde su pequeñez, con fé, con
convicciones firmes, en su proyecto de vida religiosa y misionera. Dar razones de
nuestra esperanza, del sentido de nuestra vida, que ella hable, anuncie la
Resurrección, “He VISTO al Señor y me ha dicho tales y tales cosas” Jn 20,18
Hoy son muchos los clamores: -la soledad de las personas, inclusive en vida
comunitaria se dan los individualismos, personalismos que excluyen… -El sin sentido
de la vida de donde brota las depresiones, enfermedades, desilusiones, desengaños…-
la violación de derechos a todo nivel, quedando en la injusticia, en la impunidad…-la
corrupción y el engaño…Pablo nos expresa en 1 Cor 9,16, “Ay de mì si no anuncio el
Evangelio” y es también el testimonio de Pablito.
Beber el pozo de este pueblo sufriente es tocar la misericordia y la ternura de Dios,
que se revela en el amor y la resistencia de los más excluídos de la tierra. No podemos
aceptar que esta guerra sucia sea vulnerable a todo. El misterio de la muerte, de la
vulnerabilidad en que vivimos, es preciso trascenderlo con una actitud de vida y
esperanza. “Cada una y cada uno tenemos nuestro propio pozo” decía Ivone Gebara y
beber de su propio pozo es descubrir que su vida es don, es pasión por el que sufre,
por ese otro y esa otra que cada día asesinan a nombre de un “nuevo orden” social,
económico-político, injusto.
Esa pasión es mucho más fuerte que las mismas inseguridades, es dejarse invadir de
vida plena, aquí ya no cabe la desesperanza, ni la cobardía, los pozos de los
empobrecidos en nuestros barrios populares, los pozos de las comunidades cristianas
que leen y viven la Palabra, los pozos de tantas religiosas y religiosos, laicos, que desde
el silencio, están en comunión con el pueblo sufriente, los pozos de las víctimas de esta
violencia sociopolítica, de los que luchan por los derechos humanos.
“Gracias por esta conciencia de opción por los pobres que se fue generando en
nuestra Iglesia Latinoamericana..., Desde mi concepción mental y de fe, siempre he
hablado de ir más allá de las fronteras y me tocó al interior de la Provincia estar en la
Frontera”
En este sentido, para nosotros y nosotras las cristianas y con una espiritualidad
marcada por nuestro ser de discípulos y discípulas de Jesús, la presencia de un Dios
resucitado, se hace vida, que anima y fortalece nuestra fe, el compromiso sigue siendo
signo de esperanza en aquellos gestos y hechos de solidaridad que podamos hacer
desde lo que somos y en el compartir y hacer nuestro los acontecimientos de la
realidad que nos circunda, no pasar de largo, en la indiferencia, sino dejarnos
interpelar y actuar.
Para concluir, quedémonos con esa fuerza espiritual de las mujeres, anunciadoras del
Resucitado, espiritualidad llamada hoy, Resistencia y Esperanza, que consiste en:
-Mantenerse firme en la defensa de un proyecto de vida.

-Alimentar la esperanza en medio de lo difícil
-Seguir soñando en la utopía a pesar de la amenaza
-Seguir creyendo y construyendo en la borrasca
-Reconstruir la Memoria ante la imposición del silencio
-Vivir la experiencia de Dios Resucitado en situaciones de muerte
-Es siempre buscar y no renunciar, siempre caminar desde la fe.
-Es sentir la fuerza de Dios en la debilidad humana.
-Es denunciar la injusticia y proclamar la verdad.
-Es vivir en la libertad porque la verdad nos hace libres!
El lema de las familias víctimas de Trujillo: RESISTIR, PERSISTIR Y NUNCA DESISTIR!
Que la resurrección de Mujeres Mártires, nos comprometa al anuncio de la
Resurrección de Jesús, en los nuevos escenarios de la dura e injusta realidad en que
vive nuestro pueblo colombiano, en una Iglesia de los pobres, con la fuerza de la
Teología de la liberación en la Iglesia de los pobres, expresada Hoy en la diversidad de
Rostros culturales afros, indígenas, campesinos, jóvenes, niñas y niños.


A la Memoria de los 4 años de la pascua de Jesús Vicente Salazar Giraldo, nuestro
querido PABLITO.
Mayo 2 2021

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