Esencia española

¡Feliz martes! Pasará con otros países, evidentemente, pero captar musicalmente la esencia española creo que es bastante difícil. Pero de vez en cuando hay maestro que han sabido hacerlo casi como si fuera uno de nosotros. Es que en realidad, el maestro de hoy casi llegó a ser tan español como nosotros. Vivió mucho tiempo aquí y murió en España. En su legado musical podemos disfrutar de una música en la que vemos cómo los españoles cantan y bailan de una forma que solo podemos calificar de magistral.

Esto se pone de manifiesto en la Sonata en Do Mayor, K. 159. La obra (marcada como «Vivacissimo») está llena de toda la jovialidad y alegría del joven Scarlatti, algo que no abandonó nunca sino que estuvo presente en casi todas las sonatas. Esta en realidad no es de su etapa española sino que fue publicada en Venecia en 1752 pero, ¿quién no diría que no escucha el vivo sonido de las calles madrileñas de la época aquí? Se abre con un tema lleno de optimismo escrito en forma descendente. Poco a poco la música va emergiendo de forma que los teclados alcanzan un ritmo endiablado, lleno de danza por todos los sitios. La estructura es la habitual: bipartita con repetición de cada parte y en general bastante breve. Una obra que deleita nuestros sentidos pero que es todo un reto para el intérprete tocarla con el ritmo necesario para contagiarnos.
La partitura de la obra puedes conseguirla aquí.
La interpretación es de Luc Beauséjour al clave.