¡Feliz martes! Hay veces que algunas composiciones tiene títulos curiosos. Nos encontramos con que podemos rastrear el origen de ese título y otras veces solo podemos contentarnos con especulaciones. A pesar de todo, lo importante (por lo menos aquí) es la música y la que hoy vamos a disfrutar fue compuesta por un maestro muy importante en su tiempo que viene a ofrecernos una obrita que nos sabrá verdaderamente a poco.

Se trata de John Dowland (1563-1626), compositor británico nacido posiblemente en Londres. Desarrolló su carrera en la época de la reina Isabel I y fue uno de los compositores más representativos de ese tiempo. Su música era tan melancólica que adoptó el lema Semper Dowland, semper dolens. No solo fue un maestro de la composición al laúd sino que era un muy buen cantante. En 1580 fue a París y por esa fecha se convirtió al catolicismo algo que no gustó mucho a la reina. En 1598 fue empleado como laudista del rey Cristian IV de Dinamarca pero pronto tuvo que dejar el cargo, parece ser que por no muy buena conducta. Volvió a Inglaterra y componiendo música inglesa pero ya con influencias continentales. La publicación en 1597 de obras suyas fue un punto de inflexión importante para la música de este género. Dowland también compuso música instrumental para consort de violas. Entre ella está la famosa «Lachrimae» que también se llama «Seaven Teares», una de sus obras más celebradas y más versionadas por otros maestros.

Vamos a escuchar su The Frog Galliard. No se sabe muy bien por qué esta obra fue titulada así. Hay quien dice que es por el pretendiente de la reina, a quien ella llamaba «su rana». Se trata de una composición muy famosa que otros maestros la arreglaron, como el gran Thomas Morley (aunque este no citó a Dowland como compositor). Incluso el mismo compositor reusó la melodía en alguna otra obra suya. Se trata de una obra en compás ternario, de origen italiano. El ritmo es rápido y el maestro presenta la obra gracias a una simple repetición de un motivo principal, repetición en forma de variación con más adorno. Tiene un ritmo trocaico es es la única gallarda de Dowland con este ritmo.

La interpretación es de Thomas Dunford a la tiorba.