Rut y Booz, libro de Rut

ruth-y-booz
El amor que Rut demostró por su suegra Noemí no quedó sin recompensa. Noemí, judía, se trasladó con su esposo y sus hijos a Moab por el hambre que reinaba en su país. Pero he aquí que falleció el marido de Noemí y también murieron sus dos hijos que se habían casado con dos moabitas, una llamada Orfá y la otra Noemí; de tal modo que esta mujer se quedó desamparada en tierra extranjera, viuda y sin hijos.

Noemí se enteró que el hambre que había remitido en Belén y se decidió a regresar a su tierra. Las dos nueras querían acompañar a su suegra en su regreso pero Noemí las desistía diciendo que se fueran a casa de sus padres a lo que Rut respondió: “¡No me pidas que te deje y me separe de ti! Iré a donde tu vayas y viviré donde tu vivas. Tu pueblo será mi pueblo y tu Dios será mi Dios. Moriré donde tu mueras, y allí quiero ser enterrada. Que el Señor me castigue con toda su dureza si me separo de ti, a menos que sea por la muerte”.

De este modo las dos viudas, emprendieron el camino de retorno hacia Belén.

Una vez llegadas, Rut se decide a ir a respigar, para poder subsistir las dos. Con tal suerte que fue a un campo propiedad de Booz, hombre muy rico y pariente del marido de Noemí. Este hombre se interesó por Rut y le dijo que no fuera a otro campo a respigar. Booz estaba en conocimiento de todo lo Rut había hecho por su suegra, como había abandonado su familia y su tierra para acompañarla; por lo que le dijo que no fuera a otro campo, que fuera a descansar con sus criadas y bebiera agua de los cántaros de sus trabajadores.

Por un contrato de compra de un terreno que había pertenecido a Elimélec, difunto esposo de Noemí, Booz adquirió la tierra, y por las leyes que regían, en aquel entonces,éste se casó con Rut para que la propiedad siguiera a nombre del difunto. Booz y Rut tuvieron un hijo al que pusieron el nombre de Obed, este fue padre de Jesé abuelo de David.

“Es decir que Rut, la moabita, por su matrimonio con Booz, llegó a ser bisabuela de David, y quedó así integrada en la genealogía que culmina con el nacimiento de Jesús. De este modo, la aparición de una mujer extranjera en tan ilustre genealogía muestra que Dios no hace distinción de personas cuando se tiene fe y se cumple su voluntad” (en línea Biblija.net). Texto: Hna. María Nuria Gaza.
Volver arriba