Sabin Salaberri, compositor: “La obra que estrenará Ayarra es un reto dedicado a él”

Entre los actos programados para este mes de octubre por la Cofradía de la Virgen Blanca con motivo de su 400 Aniversario se encuentra el concierto de órgano que el maestro José Enrique Ayarra ofrecerá en la iglesia del Carmen el viernes 18 de octubre. Un programa con obras de Bach, Guridi y el Himno a la Virgen Blanca de Arámburu. Y entre estos autores otro alavés, Sabin Salaberri Urcelai. De este autor será la obra dedicada a la Virgen de Estíbaliz que Ayarra estrenará en Vitoria y que repetirá en su programa del Concierto de Navidad en la Catedral de Sevilla.


Coincidencias y amistad han sido las claves que han permitido reunir a compositor – obra e intérprete: “Ayarra y yo estudiamos piano con D. Luis Arámburu y armonía con D. Julio Valdes Goikoetxea, y desde entonces nos une una gran amistad. Y casualidades de la vida hace ahora un año, en octubre de 2012 vino a dar un concierto a la iglesia del Carmen también y tuve el honor de ayudarle, pasarle las páginas, y al final me dijo “Sabin cuándo vas a componer una obra para mí”. Acepté el reto, me puse a trabajar y en marzo ya había salido la criatura, se la mande y ahora la va a estrenar. Por lo tanto esta obra es un reto dedicado a él.”

Este compositor nacido en Aramayona ha sido director de la "Schola Cantorum" del Seminario Diocesano de Vitoria y profesor en el Conservatorio de Música "Jesús Guridi" de Vitoria, donde ocupó diversos cargos de dirección. Así mismo promovió la creación de la Escuela Municipal de Música “Luis de Aramburu”, de la que fue el primer director. En 1968 fundó el Coro Araba de voces graves y en 2003 la Camerata Gasteiz. Ha perdido la cuenta de sus obras pero andan entre las 300 y 350. Esta última está dedicada a la Virgen de Estíbaliz, patrona de Álava, y recrea lo que puede ser una subida al cerro en romería: “La introducción, el preámbulo quiere hablar de los preparativos a la subida; la segunda parte es propiamente la subida al santuario; el tercer momento se refiere al acto religioso y consiste en una coral y una fuga; y el último es un movimiento alegre, festivo y podría ser una mezcla de una giga de Juan Sebastián Bach y una biribilketa de nuestros tiempos.”

Sabin se siente abrumado de tener casi de “teloneros” para el estreno de su obra a Bach, Guridi o su maestro Arámburu: “la verdad es que estoy temblando, pero que pinto yo ahí entre tanto monstruo de la música. Bueno la verdad es que José Enrique sabe perfectamente programar y habrá considerado las piezas más oportunas. Pero frente a esos genios yo soy un humilde compositor.”

Que el concierto se haga en la iglesia del Carmen, otra de las advocaciones marianas que suscita gran devoción entre los vitorianos, no es otro que el de su órgano: “es el mejor órgano de Vitoria. Otro de gran categoría es el de la Catedral de Santa María pero que está en un proceso de restauración del que le quedarán por lo menos todavía unos 10 años antes de que podamos volverlo a ver en funcionamiento. Y también el órgano centenario de la iglesia de San Pedro es una gran joya aunque tiene sus limitaciones. El del Carmen ha tenido recientemente unas innovaciones que lo hacen el más moderno y mejor órgano de Vitoria en estos momentos.”
Unos instrumentos de lujo en una tierra que siempre ha podido presumir de cultura musical y que, repasando con Sabin Salaberri el panorama actual de grandes figuras de la música se puede mantener esta afirmación con orgullo: “Hoy tenemos unos músicos excelentes y de talla internacional, y hablo solo de nuestro Territorio Histórico de Álava. Si hay que puntualizar que hasta la década de los 80 nuestros grandes músicos se movían en el mundo del órgano, hoy hay más variedad. Tenemos un Juanjo Mena dirigiendo grandes orquestas en Londres, su hermano, Carlos Mena, es un contratenor apreciadísimo desde Viena hasta Sydney; otro contratenor de gran valía es David Sagastume; te podría citar también a Alfonso Gómez que está de profesor en Friburgo; y entre los compositores Paco Ibañez que me sucedió en la dirección del Conservatorio, o Bingen Mendizabal, toda una figura en la creación de temas para el cine.”

Sin duda el próximo viernes la iglesia del Carmen estará a rebosar por el excelente programa previsto, por la calidad indiscutible de los maestros compositores, por el gran organista que interpretará sus obras, y porque el público de Vitoria es un gran entendido y gusta de la buena música.


Non solum sed etiam

Esta humildad de verse rodeado de grandes figuras de la música mundial y local es lógica en parte. Pero en el mundo de la música y en concreto de la música de órgano esa humildad y a la par orgullo se deja ver en un hecho que para el resto de los mortales pasa posiblemente inadvertido. El organista que interpreta es un maestro pero, en no pocas ocasiones quien le pasa las hojas no lo es menos. Hay que ser un gran maestro para pasar las hojas de la partitura. No cualquiera vale. Eso podríamos trasladarlo a otros órdenes de la vida, pero que cada cual haga la traslación que más le encaje.

Volver arriba