Seguro que te atrae el término "Deípara" ya que es una palabra que se usa escasamente, y solo en ambientes teológicos. Sabes que este blog no está dedicado a la teología sino a la música y eso es lo que vamos a escuchar. Sirva esta pieza de hoy como felicitación a todos los amantes de la música en el día de su patrona, santa Cecilia, virgen y mártir.

Hoy te ofrezco música de Jacob Regnart (1540-45 - 1599), maestro franco-flamenco nacido probablemente en Douai. Probablemente en su localidad natal recibió su primera formación musical. Él mismo atestigua que sirvió a los Habsburgo a partir de 1557, seguro que como cantor de la capilla de Praga, de la que era director Jacobus Vaet. Posteriormente trabajó en Viena y su fama fue creciendo cada vez más. El emperador Rodolfo II lo nombró director de su capilla. Aunque incluso Lassus lo recomendó en 1580 para un puesto en Dresde, Regnart prefirió seguir al servicio de los Habsburgo. Su música es soberbia y quizá han recibido mayor atención las obras profanas que las religiosas. Aparecen en una gran cantidad de antologías tanto contemporáneas como posteriores. Es una pena que no sea más conocido, o por lo menos todo lo que se debiera

Es una obra religiosa la que te traigo hoy de él. Concretamente sus Litania Deiparae Virginis Mariae, a 6 voces. El término "Deípara" no significa más que "Madre de Dios", es decir, sinónimo del griego "Theotokos". Apareció por primera vez en el "Thesaurus litaniarum, liber secundus" (Múnich, 1596). Como puedes ver, es una obra con las características de la escuela franco-flamenca. Estas letanías tienen un texto algo distinto a las lauretanas. La obra es jubilosa como corresponde a una obra mariana que pone fin al rezo de los misterios del rosario. Se suceden los "ora pro nobis". En la interpretación que te ofrezco, las voces están sustentadas por instrumentos, como era habitual en la época.

La interpretación es la de la Capella Sancti Michaelis, Currende Consort y Concerto Palatino dirigidos por Erik Van Nevel.