León XIV impuso las manos al obispo emérito de Palencia en su consagración episcopal Manuel Herrero, sobre León XIV: "Es un hombre sencillo, humilde, nada ostentoso, receptivo, dialogante, servicial, conciliador de opuestos y sonriente"

"Un ministro entregado, fiel reflejo del Buen Pastor, Jesucristo, sinodal, no clerical, empeñado en poner a Jesucristo en el centro de la vida personal y comunitaria de todos los cristianos e incluso del mundo"
"Que el Espíritu le acompañe y sostenga en su ministerio para bien de la Iglesia y de la sociedad actual"
"Yo desearía que visite España, pero quién sabe. Lo importante es que nos confirme en la fe, nos congregue en la Unidad y nos aliente en la caridad y anime nuestra esperanza"
"Yo desearía que visite España, pero quién sabe. Lo importante es que nos confirme en la fe, nos congregue en la Unidad y nos aliente en la caridad y anime nuestra esperanza"
Manuel Herrero (Serdio, 1947), obispo emérito de Palencia, puede presumir (y presume) de ser agustino como el nuevo Papa y de que éste le impuso las manos en su consagración episcopal como titular de la diócesis palentina en 2016. Asegura que León XIV es "un hombre sencillo, humilde, nada ostentoso, receptivo, dialogante, servicial, conciliador de opuestos y sonriente". Y, como sacerdote, un ministro "sinodal, no clerical, empeñado en poner a Jesucristo en el centro de la vida personal y comunitaria de todos los cristianos e incluso del mundo".
Monseñor Herrero cree que el Pontífice recién estrenado será "el Papa de la continuidad con sello propio" y subrayará el carisma agustino, porque "San Agustín es buen ejemplo de maestro y pastor".

¿Qué sintió, cuando se enteró de que el nuevo Papa era monseñor Prevost, su compañero agustino?
Una alegría, acción de gracias y una plegaria porque la carga (San Agustín la llamaba sarcina) es superior a la capacidad de debilidad y resistencia humana, pero con la ayuda de Dios todo es posible.
¿Coincidió con él en alguna ocasión en España?
Varias: en las visitas que hacía siendo General de la Orden a las comunidades y mi propia ordenación episcopal como Obispo de Palencia, donde él, estaba entre el grupo de obispos que me impusieron las manos, entre otros como Carlos Osoro, Nicolás Castellanos, Ricardo Blázquez y muchos de Castilla y León.
¿Y ya siendo prefecto de Obispo mantuvo algún encuentro con él?
Recuerdo uno, de manera especial; en febrero del 2024 el P. General de la ORDEN, p. Alejando Moral Antón, nos convocó a los obispos agustinos del mudo para tener unos días de convivencia en Roma e intercambiar puntos de vista pastorales y entre ellos, cómo no, estaba el Cardenal Prevost, ya prefecto del Dicasterio de los Obispos que nos animó con su presencia y ejemplo. A trabajar por la dignidad de las personas, especialmente de los pobres, humildes y descartados y construir fraternidad, basada en la verdad y en la caridad.
¿Cómo le definiría como persona?
En lo que he podido conocerle me parece un hombre sencillo, humilde, nada ostentoso, receptivo, dialogante, servicial, conciliador de opuestos y sonriente.

¿Y como sacerdote?
No puedo hablar de mi relación con él como presbítero de la Iglesia porque no hemos coincidido en el ejercicio del ministerio. Sólo tengo noticias por parte de terceros de sus servicios pastorales, también misioneros, en Chiclayo. Y estas siempre han sido positivas en el sentido de ser un ministro entregado, fiel reflejo del Buen Pastor, Jesucristo, sinodal, no clerical, empeñado en poner a Jesucristo en el centro de la vida personal y comunitaria de todos los cristianos e incluso del mundo.
¿Será el Papa de la continuidad con sello propio?
Creo que sí, porque nos sucede a todos; Dios nos ha dado a todos dones distintos y complementarios de los de los demás que nos caracterizan como personas y ministros.
¿Subrayará ideas de San Agustín y del carisma agustino, como hizo Francisco con el jesuita?
Es lógico; nuestra formación aparece en lo que somos, décimos y hacemos, con nuestros fallos e incongruencias, porque nos ha ido configurando, además de Jesucristo y su evangelio, la historia, el momento presente. Y sin desmerecer a nadie, y menos a los santos fundadores, creo que San Agustín es buen ejemplo de maestro y pastor. Así lo ha reconocido la historia y últimamente el Concilio Vaticano II -es el Padre de la Iglesia más citado explícita e implícitamente, por San Pablo VI y por San Juan Pablo II-.
¿Espera que visite España?
Yo desearía que sí, pero quién sabe. Lo importante es que nos confirme en la fe, nos congregue en la Unidad y nos aliente en la caridad y anime nuestra esperanza.

¿Qué le pide al Espíritu Santo para el nuevo Papa?
Que le acompañe y sostenga en su ministerio para bien de la Iglesia y de la sociedad actual.